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Respuesta:
La tecnología como ciencia aplicada
La tecnología como acción con instrumentos
La tecnología como aplicaciones prácticas del conocimiento
La tecnología como producción de lo necesario (superfluo)
La tecnología crea lo que no existe y es diferente a la ciencia
La tecnología es un hecho cultural de tipo diferente al científico
La tecnología como parte de la estructura de poder de una época
La tecnología como ciencia experimental
La tecnología como construcción permanente
La tecnología replantea formas de ser, pensar, actuar, hacer y convivir
No sólo globalización, también revolución del capitalismo
Modificaciones en el mundo del trabajo
Del fordismo al post-fordismo y el toyotismo
Se crea el trabajo de élite
Trabajo independiente contratado
Precarización del trabajo
El tecnócrata como nuevo sujeto de poder
Cambian también los procesos y la manera de los derechos
Cambios también en lo ético
En relación a la naturaleza
Con relación al ser humano
También se transforma la idea de democracia
El liberalismo, insuficiente para explicar procesos tecnológicos
Su idea de crecimiento económico
El mercado como regulador por excelencia del bienestar colectivo
El bien común como sumatoria de la maximización del beneficio individual
La separación radical entre lo público y lo privado
Euroamericentrismo liberal
Educación y tecnología
Educación técnica
Educación tecnológica
Educación en tecnología
Formación en cultura tecnológica
Uso de tecnología en la educación
Tecnología y globalización exigen deconstrucción y reconstrucción de la educación popular
Usos de lo popular cuestionados
Algunos caminos iniciales desde la educación popular
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* Ponencia presentada al XXXI Congreso Internacional de Fe y Alegría “Educación Popular, Comunidad y (...)
1 Mires, Fernando. La revolución que nadie soñó o la otra postmodernidad. Caracas. Editorial Nueva S (...)
“Afirmar que estamos en medio de una revolución es quizás nadar contra la corriente en un océano tormentoso*, pues, a primera vista, no hay nada que pueda aparecer menos revolucionario que los tiempos que estamos viviendo. El malestar en la modernidad quiere efectivamente significar que entramos en un período que muchos denominan post modernidad, caracterizado por el sin sentido de las cosas, en cuyo interior deambulamos sin objetivos colectivos, ausentes de toda historicidad. Es como viajar sin ruta ni plan ni destino. Pero –la pregunta es válida–: ¿no ha sido esa una característica de los procesos revolucionarios? Un quiebre histórico profundo, y eso es una revolución, produce desconcierto, desorden, perplejidad, y una reacción casi instintiva es refugiarnos en nosotros mismos o en los restos de una individualidad que sentimos amenazada por fenómenos que no logramos comprender. Así se explica que el tono predominante entre muchos intelectuales ‘post modernos’ sea no sólo melancólico, sino, a veces, francamente depresivo. Algunos me recuerdan a Poncio Pilatos, quien, según cuentan, fastidiado en la calurosa y provinciana vida de Jerusalén, escribía a un amigo de Roma: ‘Aquí la vida es insoportable; no sucede nada’. En ese mismo momento, pasaba, frente a su ventana, montado en un burro, un hombre flaco llamado Jesús”.
Fernando Mires
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te ayude
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Esta Bien la Pregunta ?
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