Respuestas
Respuesta:
Leer, entender y organizar el contenido: Suena absurdo decir esto, pero por si hay por ahí alguien que aún no se ha enterado, lo diremos: para resumir un texto primero hay que leerlo. Leerlo y entenderlo, claro. Y si esto no se consigue a la primera, pues habrá que hacerlo las veces que sean necesarias, qué le vamos a hacer… Además, lo suyo es que al menos nos hagamos una idea general del contenido del texto. Al mismo tiempo, o en segundas o terceras lecturas (porque hay escritos enrevesados hasta decir basta), debemos ir diferenciando las ideas principales para organizar el contenido y saber cómo será nuestro resumen.
Toma notas y subraya: Mientras leemos o repasamos, es aconsejable que vayamos tomando notas al margen o en otro papel de las ideas que nos van surgiendo o de aquello que nos interesará resaltar en nuestro resumen, así como subrayar lo importante para que luego lo encontremos rápidamente (recuerda que si lo subrayas todo, solo perderás el tiempo).
Haz un pequeño esquema: La semana pasada explicamos cómo hacer buenos esquemas para estudiar, así que si aún no has leído ese artículo, no te lo pierdas, porque te será muy útil para organizar tu resumen, no perder el hilo cuando empieces a redactar y clavar los contenidos.
Antes de redactar, pregúntate: ¿De qué habla el texto?, ¿qué quiere trasmitir su autor?, ¿hay algo en lo que insista o ponga más énfasis? ¿qué extensión me exigen? Hacernos este tipo de preguntas nos ayudará a saber si tenemos realmente claro el contenido del texto y cómo hacerlo para amoldarnos a las exigencias de nuestros profesores.
Redactar: Ahora que ya tenemos todo listo, solo tenemos que ponernos a escribir. Si todo lo anterior está bien hecho, redactar será coser y cantar siempre que escribamos con corrección y nos ajustemos a lo que es un resumen. Recuerda que es esencial que uses tus propias palabras y que el texto vaya bien hilado.
Explicación:
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Leer, entender y organizar el contenido: Suena absurdo decir esto, pero por si hay por ahí alguien que aún no se ha enterado, lo diremos: para resumir un texto primero hay que leerlo. Leerlo y entenderlo, claro. Y si esto no se consigue a la primera, pues habrá que hacerlo las veces que sean necesarias, qué le vamos a hacer… Además, lo suyo es que al menos nos hagamos una idea general del contenido del texto. Al mismo tiempo, o en segundas o terceras lecturas (porque hay escritos enrevesados hasta decir basta), debemos ir diferenciando las ideas principales para organizar el contenido y saber cómo será nuestro resumen.
Toma notas y subraya: Mientras leemos o repasamos, es aconsejable que vayamos tomando notas al margen o en otro papel de las ideas que nos van surgiendo o de aquello que nos interesará resaltar en nuestro resumen, así como subrayar lo importante para que luego lo encontremos rápidamente (recuerda que si lo subrayas todo, solo perderás el tiempo).
Haz un pequeño esquema: La semana pasada explicamos cómo hacer buenos esquemas para estudiar, así que si aún no has leído ese artículo, no te lo pierdas, porque te será muy útil para organizar tu resumen, no perder el hilo cuando empieces a redactar y clavar los contenidos.
Antes de redactar, pregúntate: ¿De qué habla el texto?, ¿qué quiere trasmitir su autor?, ¿hay algo en lo que insista o ponga más énfasis? ¿qué extensión me exigen? Hacernos este tipo de preguntas nos ayudará a saber si tenemos realmente claro el contenido del texto y cómo hacerlo para amoldarnos a las exigencias de nuestros profesores.
Redactar: Ahora que ya tenemos todo listo, solo tenemos que ponernos a escribir. Si todo lo anterior está bien hecho, redactar será coser y cantar siempre que escribamos con corrección y nos ajustemos a lo que es un resumen. Recuerda que es esencial que uses tus propias palabras y que el texto vaya bien hilado.
un gracias si te a ayudado
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