Por qué el oxigeno pasa de los alvéolos a la sangre y el dióxido de carbono de la sangre a los alvéolos.
Respuestas
Respuesta:
Explicación:
Los tres procesos esenciales para la transferencia del oxígeno desde el aire del exterior a la sangre que fluye por los pulmones son: ventilación, difusión y perfusión.
La ventilación es el proceso por el cual el aire entra y sale de los pulmones.
La difusión es el movimiento espontáneo de gases entre los alvéolos y la sangre de los capilares pulmonares sin intervención de energía alguna o esfuerzo del organismo.
La perfusión es el proceso por el cual el sistema cardiovascular bombea la sangre a los pulmones.
La circulación corporal es un vínculo esencial entre la atmósfera, que contiene oxígeno, y las células del cuerpo, que lo consumen. Por ejemplo, el aporte de oxígeno a todas las células musculares del organismo depende no solo de los pulmones sino de la capacidad de la sangre para transportar oxígeno y de la capacidad de la circulación para llevar sangre al músculo.
Intercambio de gases entre los espacios alveolares y los capilares
La función del aparato respiratorio es el intercambio de dos gases: el oxígeno y el dióxido de carbono. El intercambio tiene lugar en los millones de alvéolos de los pulmones y los capilares que los envuelven. Como puede verse abajo, el oxígeno inhalado pasa de los alvéolos a la sangre en el interior de los capilares, y el dióxido de carbono pasa de la sangre en el interior de los capilares al aire de los alvéolos.