Extraigan del relato: - Cuatro palabras agudas: __________________________________________________________________________________ - Cuatro palabras graves: __________________________________________________________________________________ - Cuatro palabras con hiato: ________________________________________________________________________________ - Cuatro palabras con diptongo:_____________________________________________________________________________ En China, al pie de una montaña y a orillas de un río, vivían Chou y su madre. El joven cultiva__a arroz en un pequeño campo. Sin embargo las cosechas eran insuficientes, el hambre y el frío eran visitas habituales en su casa. ¿Por qué el agua del arroyo, que debería ser cristalina, está siempre turbia? ¿Y por qué yo que trabajo sin descanso estoy siempre en la miseria?, le dijo un día a su vecino Lin. El vecino le contestó que su abuelo le había dicho que caminando hacia el oeste vivía el Viejo que Todo lo Sabe que conocía todas las respuestas. Lleno de expectativas, Chou decidió partir. A la mañana siguiente, emprendió su viaje. Andu__o cincuenta días y, ya con la lengua y los labios resecos, llegó a la casa de una mujer. Esta lo recibió y lo alimentó. Cuando se enteró hacia dónde se diri__ía Chou, le contó que tenía una hija muda, llamada Alba Azucena, y le rogó que le preguntara al Viejo por qué su hija no hablaba. Reanudó el joven su viaje y, tras cincuenta días de marcha, llegó exhausto y hambriento a la vivienda de un anciano a quien le pidió hospitalidad. Cuando el dueño de casa supo la razón de la travesía, le rogó que le consultara al viejo por qué los naranjos de su huerta no daban nunca frutos. Saciada su hambre, Chou retomó el camino, El día cincuenta se encontró con un río caudalo__o e imposible de cruzar. De pronto, flotando, apareció un dragón, quien le ofreció llevarlo a la otra orilla a cambio de que le preguntara al viejo por qué, a pesar de sus esfuerzos, no había logrado obtener la facultad de volar como los pájaros. Por fin, el viajero llegó a destino. El viejo que todo lo sabe le dijo que sólo le contestaría tres preguntas. Chou pensó que plantearía las que le habían encargado y no mencionaría las suyas. El viejo le dio las respuestas y Chou emprendió el camino de regreso. A orillas del río se encontró con el dragón y le dijo que le crecerían las alas si lo ayudaba nuevamente a cruzar y si le daba la perla que tenía en la frente. Así lo hizo el dragón y la promesa se cumplió. Salió volando por el aire. Al tiempo, llegó a la casa del anciano y le transmitió la orden del Viejo: si sacaba del pozo dos ollas llenas de oro que estaban allí, el agua se purificaría y cada gota se convertiría en una naranja. En recompensa, el hombre le regaló una olla de oro. Por fin, Chou arribo a la casa de la mujer y le revelo un secreto: para que su hija recobrara el habla, tenia que tocar la perla del dragón. El joven se acerco a Alba Azucena, ella tomó la joya, abrió los ojos y dijo: Madre, ¿quién es éste joven?
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Respuesta:
Explicación:
Recuerda la norma de ortografía de las palabras agudas: se acentúan las palabras agudas cuando acaban en ‘n’, ‘s’ o vocal. Pero cuidado, porque hay excepciones: no se acentúan las palabras agudas que terminan en ‘s’ pero van precedidas de otra consonante. Por ejemplo ‘robots’. Y sí se acentúan palabras agudas que no acaban en ‘n’ o ‘s’ en el caso de que se rompa un diptongo (es decir, cuando se separan dos vocales que iban juntas), como ‘maíz’ o ‘Raúl’.
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Repasa la acentuación de las palabras agudas con estos divertidos dictados. Para que se sea más sencillo localizar las palabras agudas, las verás de color naranja:
1. A Ramón le encanta jugar al balón. Pero cuando juega en el salón de su casa, su madre se enfada con él un montón porque un día rompió un jarrón muy caro de su tía Belén. Así que Ramón ya tiene mucho más cuidado. De hecho, en casa, prefiere el futbolín.
2. El bebé de mi tía Asunción es precioso, pero cada vez que vamos a verle, llora con desesperación. La verdad es que es un alivio que no viva con nosotros. ¡Jamás me dejaría escuchar la televisión! Así que prefiero verle de vez en cuando, aunque tenga que ir en avión, porque mi tía Asunción vive en San Sebastián, que está un poco lejos de mi ciudad.
3. A Marcos le encanta ser el campeón del torneo de fútbol de tercera división, pero no siempre lo consigue. El equipo de José es muy bueno, y además juega con mucha ilusión y pasión. Muchas veces ganan, aunque apenas toquen el balón. Así que este año seguramente queden primeros en la competición y hagan felices a su afición.
4. A mi no me gusta acusar a nadie, pero en cuanto tenga la confirmación de quien se llevó la sartén del comedor, se lo pienso decir a mamá. Es porque al final a mi hermano Carlos siempre le dan la razón, aunque mienta. Así que vigilaré y observaré muy bien. En cuanto entre el ladrón, ¡zas! le sorprenderé.
5. El próximo verano nos iremos de vacaciones a Gijón. Dicen que es muy bonito, así que seguro que me gusta. Me llevaré algún pantalón por si hace frío, aunque según dicen, hará mucho sol. Me parece genial. Ya estaba cansada de la ciudad, así que prepararé la maleta con mucha ilusión.
6. A mis padres les encanta salir a cenar de vez en cuando. Hoy iremos a un japonés. Yo una vez probé sushi y me gustó, aunque reconozco que prefiero el jamón, el salchichón y la tortilla de patata. Pero al menos nos divertiremos y haremos algo diferente. ¡Qué emoción!
7. De entre todos los animales, el que más miedo me da es el tiburón. Tiene los dientes afilados y los ojos a los lados. ¡Menuda impresión! Además, nada muy despacio y no me fío… es como el camaleón, que parece que es de un color, pero solo es porque se camufla. Aunque en realidad, también me da un poco de miedo el león. Y a ti, ¿qué animal te asusta más?