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Hubo una vez una princesa increíblemente rica, bella y sabia. Cansada de pretendientes falsos que se acercaban a ella para conseguir sus riquezas, hizo publicar que se casaría con quien le llevase el regalo más valioso, tierno y sincero a la vez. El palacio se llenó de flores y regalos de todos los tipos y colores, de cartas de amor incomparables y de poetas enamorados. Y entre todos aquellos regalos magníficos, descubrió una piedra; una simple y sucia piedra. Intrigada, hizo llamar a quien se la había regalado. A pesar de su curiosidad, mostró estar muy ofendida cuando apareció el joven, y este se explicó diciendo:
- Esa piedra representa lo más valioso que os puedo regalar, princesa: es mi corazón. Y también es sincera, porque aún no es vuestro y es duro como una piedra. Sólo cuando se llene de amor se ablandará y será más tierno que ningún otro.
El joven se marchó tranquilamente, dejando a la princesa sorprendida y atrapada. Quedó tan enamorada que llevaba consigo la piedra a todas partes, y durante meses llenó al joven de regalos y atenciones, pero su corazón seguía siendo duro como la piedra en sus manos. Desanimada, terminó por arrojar la piedra al fuego; al momento vio cómo se deshacía la arena, y de aquella piedra tosca surgía una bella figura de oro. Entonces comprendió que ella misma tendría que ser como el fuego, y transformar cuanto tocaba separando lo inútil de lo importante.
Durante los meses siguientes, la princesa se propuso cambiar en el reino, y como con la piedra, dedicó su vida, su sabiduría y sus riquezas a separar lo inútil de lo importante. Acabó con el lujo, las joyas y los excesos, y las gentes del país tuvieron comida y libros. Cuantos trataban con la princesa salían encantados por su carácter y cercanía, y su sola prensencia transmitía tal calor humano y pasión por cuanto hacía, que comenzaron a llamarla cariñosamente "La princesa de fuego".
Y como con la piedra, su fuego deshizo la dura corteza del corazón del joven, que tal y como había prometido, resultó ser tan tierno y justo que hizo feliz a la princesa hasta el fin de sus días......fin
En 2002 un joven con su familia fue de viaje a un lugar exótico (región de la selva) , donde abundaban los árboles gigantes y habían animales por todos lados, desde monos y aves hasta serpientes y cocodrilos en los lagos, el joven habia ido allí para visitar a sus abuelos, pues era el cumpleaños de uno de ellos y que mejor manera de darle una sorpresa llendo a su casa sin aviso dijeron sus padres... Tal cual como lo habían predicho, su abuelo se entusiasmó y los recibió con los brazos abiertos... Fue un día muy divertido y especial, pues comieron, jugaron y platicaron sin parar hasta que llego la noche, en ese lugar la noche era de un tono azuleado pero hermoso, a lo lejos se veían las estrellas y la luna se veia inmensa y brillante... El joven quedo rápidamente fascinado, en eso el abuelo se le acerco y le dijo:
Abuelo: Te gusta la naturaleza eh?...
Joven: Ah si... En la capital no se ve esto todos los días
Abuelo: Ya veo... Bien, porque no hacemos una pequeña fogata y vemos este anochecer.
El joven rápidamente asintió, al estar sentados presenciando el cielo...
J: Que bonito...
A: Si, verdad? ... Aunque sea un bonito anochecer, nunca salgas de noche
J: ¿Porque?
A: Existe una historia, en donde se dice que a los niños por las noches se le aparece un indio el cual los secuestra y los desaparece, ad...
En ese instante la madre del joven interrumpió y le dijo a su padre que ya era tarde y debían irse, el abuelo asintió y se despidió de su nieto sin antes recalcar "no salgas de noche", el joven asintió y se fue a la casa a dormir como cualquier noche, en su mente él no creia en esas historias pero desobedecer una orden podría costarle caro, un severo castigo.
El joven se durmio, sin embargo a las 3am sono un ruido muy fuerte que le hizo levantarse... Se percató que la puerta estaba abierta, pero en vez de levantarse a cerrarla dijo "Papá, la puerta esta abierta"... Al ver que nadie respondía volvió a llamarlo pero esta vez con mayor intensidad "Papá!" ; sin respuesta alguna y con sueño fue a buscarlo... mas su sorpresa fue que no habia nadie en la casa.... al percatarse salió a ver que sucedia o si estaban afuera, sin embargo no encontro nada más que huellas de una persona, el joven pensaba que le estaban gastando una broma y para demostrar ser valiente siguió las huellas obviando la advertencia de su abuelo.
Mientras caminaba se encontraba con animales sin vida, él pensó tan lejos llegaron?, él no mostraría debilidad por eso siguió caminando siguiendo aquellas huellas, al llegar al final no encontró a nadie, pensando en que le habian jugado una mala broma decidió volver pero las huellas ya no estaban, él no sabía el camino de regreso... Se había perdido.
Toda esa valentía que emanaba al comienzo se esfumó y comenzo a temblar y a tener miedo... La luna y las estrellas ya no estaban... La noche tan hermosa se habia convertido en una capa oscura donde solo se podía ver los gigantes árboles uno tras otro, en eso una luz brillante emano en un sitio cercano, sin pensarlo dos veces el joven corrió hasta allí para pedir ayuda, al llegar se encontro con un niño, con una cara pintada de blanco y uñas grandes, tenía contextura delgada y parecía un animal... Por su aspecto no parecía un humano, sin embargo el joven con su inocencia e inexperiencia dijo "donde estamos?"
El niño parado a su al frente no contesto, se quedó parado mirandolo con una sonrisa en su rostro, de pronto se le abalanzó al joven y comenzo a perseguirlo, con sus uñas afiladas hirió su piel dejando grandes heridas en su brazo y barriga, ante el dolor y el miedo gritó lo más fuerte pidiendo ayuda sin obtener respuesta alguna... Aún sin tener fuerza y sangrando por las heridas que le habia dejado el pequeño indio no decidió rendirse y sin saber cómo el joven logro empujarlo y correr a todo pulmon... Decidió correr sin mirar atras mientras el indio lo perseguía y gritaba, ese grito era aterrador, un grito de sufrimiento y rencor... El joven llorando corrió sin detenerse y sin saber como lo logro llego a la casa de su abuelo, sin pensarlo 2 veces ingreso y cerró la puerta... El indio ya no estaba... El indio había dejado de perseguirlo, sin pensarlo se fue a la cama a dormir... Al día siguiente amaneció moribundo, con heridas graves... Los padres preocupado le dijeron que habia hecho y el joven simplemente no respondió... No se lo contó a nadie excepto a mí... Hoy mi difunto hermano descansa en paz, los doctores dicen que probablemente un león lo atacó y por pura suerte logro sobrevivir por unas horas, pero yo sé que no, sé que mi hermano vió algo ese día... Ese niño... Ese indio fue el culpable de la muerte de mi hermano... Esta historia no la cuento para que deambulen en la noche por la parte alta de la selva... Sino para que tengan cuidado y sepan que la leyenda del indio asesino es real y si no me crees, verificalo tú mismo pero no te aseguro que vuelvas con vida...