Respuestas
Por Hermanas de la Providencia.
Solidaridad es el sentimiento que impulsa a actuar a una persona para ir en ayuda de otra o acompañarla en los momentos difíciles en que se encuentra, por ejemplo, en una catástrofe o luego de la pérdida de alguien querido. Chile se ha caracterizado por esto: la gente de nuestro país siempre ha tratado de ayudar en terremotos, incendios, inundaciones, en Navidad o durante la Teletón. Estas ayudas son muy valiosas, pero momentáneas. En algunos casos deberían ser más estables, porque la solidaridad es una actitud y una forma de vida.
La solidaridad tiene un significado profundo y espiritual, ya que es la acción, el cuidado, la preocupación, el amor de Dios Padre Creador y Providente, especialmente por las personas. Él siempre tiene para con nosotr@s una actitud misericordiosa.
El papa Juan Pablo II nos dijo que la misericordia es una forma más grande de amor, ya que no hace distinción de pecado, dolor o situaciones difíciles. El Padre siempre espera nuestro cambio, nuestra conversión; la misericordia aparece como un amor salvador, deseoso de ayudar a levantar a quien está caíd@ y oprimid@.
La misericordia se traduce en la lengua latina en la palabra compasión; por lo mismo, la confianza en la Providencia es tener confianza en el plan de amor compasivo y misericordioso de Dios, y en el poder que la ternura y fidelidad de dicha compasión y misericordia implican en el misterio de la compasión de Nuestra Madre de los Dolores, modelo de vida cristiana y ejemplo de confianza en la Providencia.
En la historia de las Hermanas de la Providencia vemos reflejado vivo el espíritu de la solidaridad desde sus inicios, especialmente en las acciones de Madre Emilia, Madre Bernarda y Madre Joseph, quienes escucharon el llamado del Padre presente en el rostro de l@s más pobres y con caridad supieron dar forma a la obra de Dios. En Chile, se inició con la atención y cuidado de niñ@s huérfan@s y siempre al servicio de los requerimientos del momento, creando diversos ministerios que hoy se expresan en obras educativas, sociales y parroquiales; transmitiendo así la evangelización con sello Providencia y entregando herramientas para que las personas sean más justas y solidarias.
Un claro ejemplo diario y concreto de solidaridad es nuestro comedor Emilia Gamelin, en donde a herman@s en situación de calle se les da servicio de almuerzo, acogida y atención en necesidades materiales, junto a una evangelización que da esperanzas y dignidad a sus vidas.
Les invitamos a reflexionar:
· ¿Cómo vivo mi solidaridad?
· ¿Estoy junto a otr@s que lo necesitan?
· ¿Soy compasiv@ con personas que sufren los efectos de la drogadicción, la injusticia social, la soledad, la depresión, la marginación y tantos otros males?
Respuesta:
Hay que pensar que nosotros tenemos más que otras personas, tenemos que ponernos en el lugar de la otra persona y comprenderla para poder ayudar, porque si podemos hacer algo para ayudar deberíamos hacerlo.
La solidaridad es un valor que algunas veces nos puede hacer perder cosas pero nos devuelve otras más valiosas. Nosotros también debemos que ser solidarios sin esperar nada a cambio, eso nos ayudará mucho en el futuro.