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El huerto o la jardinería en si es un pasatiempo relajante y gratificante. Pocas cosas hay tan gratificantes como cultivar tus propias verduras y frutas. Tan entusiastas somos que ni siquiera nos gusta dejar de hacerlo cuando hace frío.
Muchas plantas son especialmente sensibles a las duras condiciones atmosféricas, pero eso no es un impedimento para que podamos cultivar nuestros propios alimentos. La gran ventaja de tener un invernadero es poder preparar nuestros propios semilleros todo el año y tener plantones a punto cuando lleguen las temporadas de plantación. Gracias a esto nos ahorraremos un dinero y nos aseguraremos que nuestras plantas son 100% ecológicas, algo que en muy pocos viveros agrícolas nos pueden garantizar.
Aquí es donde un invernadero puede ser bastante efectivo y necesario. Pero suelen ser algo costosos, por eso un invernadero casero puede ser la solución perfecta, tanto en costes como en complejidad.
Hemos hecho una buena selección de planos e ideas, así como tutoriales sobre cómo hacer nuestro propio invernadero incluso reciclando materiales. Sólo tienes que seguir los pasos de tu diseño preferido (hay muchos diseños, para cualquier personalidad y ambiente) y estarás cuidando de tus plantas en medio del invierno sin preocupaciones.
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