• Asignatura: Castellano
  • Autor: betsynps7
  • hace 7 años

Poemas de José Santos Chocano

Respuestas

Respuesta dada por: saraiwfree05
8

Respuesta:

los Andes son de plata, pero el león, de oro, y las dos castas fundo con épico fragor. un blanco aventurero o un indio emparedo.

Explicación: de nada

Respuesta dada por: stefyjulieth
6

Respuesta:

LA CANCION DEL CAMINO

Era un camino negro.

La noche estaba loca de relámpagos. Yo iba

en mi potro salvaje

por la montañosa andina.

Los chasquidos alegres de los cascos,

como masticaciones de monstruosas mandíbulas

destrozaban los vidrios invisibles

de las charcas dormidas.

Tres millones de insectos

formaban una como rabiosa inarmonía.

Súbito, allá, a lo lejos,

por entre aquella mole doliente y pensativa

de la selva,

vi un puñado de luces, como un tropel de avispas.

¡La posada! El nervioso

látigo persignó la carne viva

de mi caballo, que rasgó los aires

con un largo relincho de alegría.

Y como si la selva

comprendiese todo, se quedó muda y fría.

Y hasta mí llegó, entonces,

una voz clara y fina

de mujer que cantaba. Cantaba. Era su canto

una lenta... muy lenta... melodía:

algo como un suspiro que se alarga

y se alarga y se alarga... y no termina.

Entre el hondo silencio de la noche,

y a través del reposo de la montaña,

oíanse los acordes

de aquel canto sencillo de una música íntima,

como si fuesen voces que llegaran

desde la otra vida..

Sofrené ml caballo;

y me puse a escuchar lo que decía:

- Todos llegan de noche,

todos se van de día...

Y, formándole dúo,

otra voz femenina

completó así la endecha

con ternura infinita:

- El amor es tan sólo una posada

en mitad del camino de la vida.

Y las dos voces, luego,

a la vez repitieron con amargura rítmica:

- Todos llegan de noche,

y todos se van de día ...

Entonces, yo bajé de mi caballo

y me acosté en la orilla

de una charca.

Y fijo en ese canto que venía

a través del misterio de la selva,

fui cerrando los ojos al sueño y la fatiga.

Y me dormí, arrullado; y, desde entonces,

cuando cruzo las selvas por rutas no sabidas,

jamás busco reposo en las posadas;

y duermo al aire libre mi sueño y mi fatiga,

porque recuerdo siempre

aquel canto sencillo de una música íntima:

- Todos llegan de noche,

todos se van de día!

El amor es tan sólo una posada

en mitad del camino de la vida...

Preguntas similares