un argumento sobre la contradicción entre la economía y la democracia después de los acuerdos de paz de El Salvador​

Respuestas

Respuesta dada por: leiverpa19
4

Respuesta:

El propósito de este artículo es hacer una evaluación de los dinamismos políticos, económicos y sociales de 1996. La hipótesis que las recorre de principio a fin es que, en el año recién finalizado, los mecanismos de intermediación socio-política en El Salvador fueron incapaces de desempeñar su rol en el proceso de instauración democrática. En este sentido, ante el divorcio creciente entre la lógica de la economía de mercado y la lógica del empobrecimiento social, la política no pudo hacer de "intermediaria" entre una y otra, abriendo la puerta para que protestas sociales disruptivas y respuestas estatales coactivas y/o represivas tomaran el lugar de las soluciones concertadas, pacíficas y legales.

 

Así, la razón terminó cediendo su lugar a la fuerza, la negociación a la confrontación y, peor aún, los nacientes esfuerzos democratizadores dieron paso a la amenaza autoritaria. Como resultado, la "institucionalización democrática" no sólo no avanzó al ritmo esperado por la mayoría de salvadoreños, sino que se vio amenazada tanto por la debilidad interna de los partidos y el sistema político como por quienes no ocultaron sus resquemores ante los valores y reglas de la democracia.

 

Una evaluación de 1996 no puede eludir el acercamiento a estos problemas, así sea tan solo para llamar la atención sobre lo difícil que está resultando consolidar instituciones democráticas y habérselas con actitudes y comportamientos marcadamente autoritarios. Asimismo, no se puede evadir el examen de las dinámicas económica, ecológica y social, pues es precisamente su incapacidad de integración recíproca lo que genera los conflictos estructurales que marcan a sociedades como la nuestra. Con todo, antes de avanzar en el examen de los puntos señalados, es pertinente hacer un esbozo global de lo sucedido en El Salvador durante 1996, que nos servirá como contexto para una comprensión más cabal de aquéllos.

 

El Salvador en el horizonte de los acuerdos de paz

Ante todo, remitámonos a 1992. El FMLN y la primera administración de ARENA ultimaban detalles para firmar los documentos que terminarían con doce años de guerra civil y sentarían las bases para una reforma política y económica en el país, en orden a superar los desequilibrios estructurales que generaron el conflicto. En enero de 1992 los acuerdos fueron firmados, inaugurando una de las fases más difíciles del proceso de transición iniciado a principios de la década.

 

A casi nadie se le escapaba que la "solución intermedia" conseguida en la negociación dejaba pendientes importantes puntos. Pero, al calor del protocolo negociador, el optimismo fue la nota característica del momento, un optimismo especialmente notorio en la izquierda. Algunos de sus portavoces denominaron a la coyuntura como una de "revolución negociada". Ahora sí --se pensaba en los círculos que se sentían comprometidos con la justicia y la igualdad-- el país se estaba poniendo en la ruta de los cambios estructurales tan largamente esperados, por los que tantas vidas se habían sacrificado y los que tantas frustraciones habían dejado en el pasado: la llegada de la izquierda al escenario político y su acceso a una cuota significativa de poder eran los requisitos básicos para avanzar hacia aquellos cambios.

Explicación:

espero que te sirva la respuesta

Preguntas similares