1.¿Por qué se dice que Europa financió su desarrollo con el antidesarrollo de América? 2. ¿Por qué crees, que a pesar de los nuevos productos agrícolas traídos por los europeos, el sector agrícola colonial estuvo atrasado con respecto a la agricultura prehispánica?
Respuestas
Respuesta:
Los países y los pueblos de la Unión Europea están unidos a los de América Latina y el Caribe por muchas raíces comunes de carácter histórico, espiritual y cultural y comparten con ellos los valores e ideales de libertad, solidaridad, derechos humanos universales y Estado de derecho.
El éxito del proceso de América Latina y el Caribe hacia la paz, la democracia y el desarrollo sostenible ha reforzado su papel en la comunidad internacional al tiempo que Europa avanza en su proceso de unidad.
En el marco de nuestra política exterior y de seguridad común proponemos actuar conjuntamente con América Latina y el Caribe para propiciar una nueva colaboración entre ambas regiones destinada a mantener la paz, asegurar el respeto universal de los derechos humanos, incrementar los intercambios económicos equilibrados, fomentar el desarrollo sostenible, combatir la pobreza y la degradación del medio ambiente y estrechar los lazos científicos y culturales.
2. Rendimos tributo y apoyamos los esfuerzos emprendidos en el área para consolidar la democracia representativa y el Estado de derecho, modernizar las instituciones y mejorar la moral pública, abrir e integrar las economías y promover la justicia social. Si así se desea, estamos dispuestos a contribuir con nuestro asesoramiento y experiencia y, en caso necesario, con nuestra ayuda.
3. El respeto a los derechos humanos y las libertades fundamentales, así como la participación de todos los ciudadanos en la configuración del futuro político y en el progreso económico y social de su país son vitales para el desarrollo pacífico, tanto a nivel nacional como internacional.
En consecuencia, condenamos todas las violaciones de los derechos humanos y pedimos el castigo de los responsables. Se debe velar mediante una actuación decidida y una administración eficaz de la justicia para que las violaciones de los derechos humanos no queden impunes.
4. El control de las Fuerzas Armadas por la autoridad civil constitucional es fundamental para la estabilidad interna de todos los Estados, su participación en la cooperación internacional y la consolidación de la paz en la zona.
Alentamos aquellos intentos encaminados a que las Fuerzas Armadas tengan un nuevo papel orientado al futuro, que apoye los esfuerzos internacionales en la búsqueda de la paz y la seguridad.
5. Reconocemos los recientes progresos de nuestros asociados en lo que respecta al desarme y al control de armamentos, la no proliferación y el control de las exportaciones sensibles. Instamos a los países que todavía no han ratificado el Tratado de Tlatelolco a que lo hagan pronto, y a los que aún no son parte del Tratado de no proliferación les alentamos a que se adhieran a él. Invitamos a todos los países a que apoyen la ampliación indefinida e incondicional del Tratado de no proliferación. Aplaudimos el diálogo iniciado sobre las medidas para fomentar la confianza, al que podemos aportar la experiencia concreta europea.
6. Expresamos nuestra satisfacción ante la importancia que ha adquirido la Organización de los Estados Americanos en la defensa de la democracia representativa y los derechos humanos y en la lucha contra la pobreza. Apoyamos plenamente sus acciones para asegurar unas elecciones libres y democráticas.
Valoramos y apoyamos los esfuerzos en pro de la paz realizados por las Naciones Unidas y la Organización de los Estados Americanos así como por los grupos de Estados amigos en América Central y el Caribe. Reiteramos nuestra disponibilidad para contribuir a reintegrar a los refugiados y excombatientes en la vida civil.
7. Acogemos con agrado las grandes contribuciones de los países de América Latina y el Caribe para mantener la paz mundial y la seguridad internacional y afrontar los retos globales de nuestra época, así como para proporcionar mayores medios a las Naciones Unidas para el desarrollo de sus tareas fundamentales. Proponemos que se intensifique el diálogo sobre estos asuntos.
8. Tomamos nota, con especial satisfacción, de los procesos de integración regional y subregional que se están llevando a cabo en América Latina y el Caribe y reiteramos que estamos dispuestos a compartir nuestra experiencia en este ámbito.
Nos proponemos profundizar el diálogo y la cooperación entre la Unión Europea, el Grupo de Río, América Central (San José) y Mercosur, ampliar los temas de debate y destacar los aspectos políticos de este diálogo. Estamos dispuestos a iniciar y a fortalecer el diálogo y la cooperación con otras agrupaciones regionales y subregionales, así como con cada país por separado.