Respuestas
Respuesta:
Poesía del aire
LA BRISA
La brisa toca con sus yemas
el suave envés de las hojas. Brillan
y giran levemente.
Las sobresalta y alza
con un suspiro, con otro. Las pone alerta.
Como los dedos sensitivos de un ciego
hurgan entre el viento las hojas;
buscan y descifran sus bordes,
sus relieves de oleaje, su espesor.
Cimbran
sus fluidas teclas silenciosas.
Poesía del agua
Agua, ¿dónde vas?
Riendo voy por el río
a las orillas del mar.
Mar, ¿adónde vas?
Río arriba voy buscando
fuente donde descansar.
Chopo, y tú ¿qué harás?
No quiero decirte nada.
Yo..., ¡temblar!
¿Qué deseo, qué no deseo,
por el río y por la mar?
(Cuatro pájaros sin rumbo
en el alto chopo están).
Poesía del suelo
EL SUELO QUE TÚ PISAS
¿Quién cambiará la forma de las calles
para que yo pueda pasar por ellas?
Has marcado este lugar con tus pasos,
llenándolo de luz todas las tardes;
tú, que eres la única luz de mi mundo.
Estás en cada rincón de este suelo;
en el aire, en el sol, en todas partes:
tu olor, tus ojos pardos y tranquilos.
Esta es la maldición de tus pupilas
–puertas del alma labradas en carne –;
quedarte aquí y arañarme la mirada,
mientras yo le araño horas a la vida
y los cipreses rayos a la luna.