Respuestas
Respuesta:
Sigue una dieta saludable. Come alimentos como el aceite de oliva virgen extra, los vegetales, las frutas, los pescados, los huevos y los cereales. Hay que evitar en la medida lo posible la sal, las grasas de origen animal, el azúcar y los alimentos precocinados.
Controla la hipertensión. Es conveniente mantener la hipertensión bajo control médico y realizar controles periódicos de la tensión arterial, especialmente si es elevada, y aunque se esté controlando con tratamiento.
Abandona el tabaco. Uno de los factores que debemos evitar para mantener un cerebro sano es el tabaquismo. Eliminar este hábito de nuestra vida es muy aconsejable para prevenir numerosas enfermedades.
Vigila la obesidad, el colesterol y la diabetes. Para ello es recomendable seguir una dieta equilibrada y realizar las revisiones médicas pertinentes.
Haz ejercicio moderado todos los días. Basta con adaptar una rutina sencilla todos los días, como por ejemplo, salir a caminar a ritmo rápido durante 30 minutos, ir al gimnasio, practicar algún deporte o hacer una tabla de ejercicios en el parque. Si tu ritmo de vida te obliga a ir arriba y abajo, puedes hacerlo caminando y aprovechar estos desplazamientos para invertir en tu salud. Las tareas del hogar, el bricolaje, bailar o jugar con los niños también suman para acumular tiempo de actividad física diaria.
Cuida tu bienestar emocional. El bienestar emocional es fundamental para tener una vida tranquila y lo más equilibrada posible. Al mismo tiempo, es conveniente tratar las depresiones de manera adecuada y llevar el control médico y psicológico que sean necesarios.
Mantén la actividad intelectual. Una alta reserva cognitiva puede ser una buena aliada para mantener un cerebro sano y resistir las afectaciones que el Alzheimer puede producir. Para ello es importante mantener estimulada nuestra mente con actividades que nos supongan pequeños retos. Una de las actividades más reconocidas es la lectura. También son muy recomendables el ajedrez y los juegos de mesa, ya que muchos de ellos requieren habilidades de cálculo, de memoria reciente y de capacidad de previsión. Todo lo que implique aprender y adquirir nuevos conocimientos también favorecerá nuestra actividad cognitiva, sea tomar clases de cocina o el aprendizaje de un idioma o instrumento musical.
Cultiva las relaciones. Otra parte fundamental para la salud cerebral tiene que ver con las relaciones sociales. Es necesario salir de casa y mantenerse activo socialmente. Conversar con gente y estar al día ayuda a tener un cerebro joven. Hemos de procurar pasar tiempo con nuestros seres queridos y mantener el contacto y la relación con amigos y vecinos. Participar en asociaciones, clubs o realizar un voluntariado puede ayudar también a establecer nuevas relaciones.
Explicación:
son para mantener un cerebro sano espero te sirva