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Cómo se consigue la frecuencia cardíaca en la zona objetivo?
Cuando hace ejercicio, ¿está haciendo demasiado o no el suficiente? Hay una forma sencilla de saberlo: su frecuencia cardíaca objetivo la ayuda dar en el blanco para que pueda sacar el máximo partido a cada pisada, swing o sentadilla. Aunque no sea una atleta de élite ni una rata de gimnasio, conocer su frecuencia cardíaca (o pulso) puede ayudarla a realizar un seguimiento de su salud y su nivel de forma física.
Lo primero es lo primero: frecuencia cardíaca en reposo
La frecuencia cardíaca en reposo es el número de veces que el corazón late por minuto cuando está descansando. Un buen momento para comprobarla es por la mañana, después de una buena noche de descanso, antes de levantarse de la cama o tomar la primera taza de café.
Para la mayoría de nosotros, lo normal está entre 60 y 100 latidos por minuto (lpm).1 La frecuencia puede verse alterada por factores como el estrés, la ansiedad, las hormonas, los medicamentos y la cantidad de actividad física que practica. Un atleta o una persona más activa puede tener una frecuencia cardíaca en reposo de hasta 40 latidos por minuto. ¡Eso es impresionante!
En lo que se refiere a la frecuencia cardíaca en reposo, cuanto menor sea, mejor. Por lo general, significa que el músculo cardíaco está en buen estado y no tiene que esforzarse para mantener un ritmo estable. Los estudios han demostrado que una frecuencia cardíaca en reposo más alta está relacionada con una baja condición física, una presión arterial elevada y un peso corporal mayor.2