5 juegos recreativos y su objetivo en la educación física
Respuestas
Respuesta:
Domino: Este juego tradicional requiere de veintiocho fichas de mármol blancas o negras rectangulares con diversos puntos marcados en sus extremos, de manera que cada una tenga un número del 1 al 6 asignado en cada punta. Las fichas se colocan boca abajo y se mezclan, luego se reparten entre 2 o 4 jugadores, hasta tener cada uno siete. Las reglas del juego varían de acuerdo a la región, pero el cometido del juego suele ser quedarse sin fichas antes que los demás, jugando una por turno formando una cadena con las de los demás, pareando los números semejantes.
Los atados. Este juego requiere de un grupo grande para practicarse. Un elegido se posiciona de espaldas al grupo mientras los demás se toman firmemente de las manos formando una cadena. Entonces los punteros de la cadena deberán moverse entre los eslabones sin soltarse ni interrumpir la cadena, hasta quedar atados o enredados. Entonces el elegido debe voltear e intentar desanudar la cadena sin romperla.
La “mancha”. Conocido con muchísimos nombres a lo largo del mundo, este es el clásico juego de persecución en que un individuo debe correr detrás de otro u otros hasta alcanzarlo y, entonces, cambiar posiciones. Es un clásico juego infantil que sin embargo es muy practicado entre atletas adultos, pues fomenta la resistencia física y la velocidad.
STOP. Para jugar STOP se requiere de papeles y lápices, así como dos o más jugadores. Cada uno tendrá un lápiz y un papel, en el cual trazará una serie de columnas a convenir: la primera necesariamente será para las letras de juego, y las siguientes para color, marca, animal, país y otras categorías que los jugadores pacten. Una vez lista la hoja, elegirán por turnos una letra del abecedario y deberán escribir en cada columna un nombre de país, de color, de marca, etc. que inicien con dicha letra. Cuando algún jugador complete todos los renglones dirá en voz alta “STOP” y nadie más podrá escribir en su hoja. Entonces se leerán las palabras del ganador, y por cada una obtendrá 100 puntos o 50 puntos si algún otro jugador logró escribirla también.
El perrito. Este juego requiere de una pelota de alguna naturaleza. Los jugadores deberán ser tres como mínimo: dos a los extremos del espacio de juego y uno en el centro. Los jugadores en los extremos deberán arrojarse la pelota evitando que el jugador del medio (quien hace de “perrito”) lo alcance. Si en algún momento el perrito se hace con la pelota, el jugador responsable pasará al medio y el juego reiniciará.
Ajedrez. Más que un juego, un deporte lúdico muy practicado en las diversas regiones del mundo. Se trata de un juego de 32 piezas, blancas y negras, cada una esculpida conforme a un ejército: peones, torres, caballos, alfiles, reina y rey. Cada pieza tiene sus reglas de movimiento y de eliminar a las del otro, y el cometido del juego es reducir el ejército enemigo hasta tener acceso al rey opuesto y acorralarlo hasta que no haya movimientos posibles. Es uno de los grandes juegos de la humanidad.
.Explicación:
Respuesta:
Dominó. Este juego tradicional requiere de veintiocho fichas de mármol blancas o negras rectangulares con diversos puntos marcados en sus extremos, de manera que cada una tenga un número del 1 al 6 asignado en cada punta. Las fichas se colocan boca abajo y se mezclan, luego se reparten entre 2 o 4 jugadores, hasta tener cada uno siete. Las reglas del juego varían de acuerdo a la región, pero el cometido del juego suele ser quedarse sin fichas antes que los demás, jugando una por turno formando una cadena con las de los demás, pareando los números semejantes.
Los atados. Este juego requiere de un grupo grande para practicarse. Un elegido se posiciona de espaldas al grupo mientras los demás se toman firmemente de las manos formando una cadena. Entonces los punteros de la cadena deberán moverse entre los eslabones sin soltarse ni interrumpir la cadena, hasta quedar atados o enredados. Entonces el elegido debe voltear e intentar desanudar la cadena sin romperla.
La “mancha”. Conocido con muchísimos nombres a lo largo del mundo, este es el clásico juego de persecución en que un individuo debe correr detrás de otro u otros hasta alcanzarlo y, entonces, cambiar posiciones. Es un clásico juego infantil que sin embargo es muy practicado entre atletas adultos, pues fomenta la resistencia física y la velocidad.
STOP. Para jugar STOP se requiere de papeles y lápices, así como dos o más jugadores. Cada uno tendrá un lápiz y un papel, en el cual trazará una serie de columnas a convenir: la primera necesariamente será para las letras de juego, y las siguientes para color, marca, animal, país y otras categorías que los jugadores pacten. Una vez lista la hoja, elegirán por turnos una letra del abecedario y deberán escribir en cada columna un nombre de país, de color, de marca, etc. que inicien con dicha letra. Cuando algún jugador complete todos los renglones dirá en voz alta “STOP” y nadie más podrá escribir en su hoja. Entonces se leerán las palabras del ganador, y por cada una obtendrá 100 puntos o 50 puntos si algún otro jugador logró escribirla también.
El perrito. Este juego requiere de una pelota de alguna naturaleza. Los jugadores deberán ser tres como mínimo: dos a los extremos del espacio de juego y uno en el centro. Los jugadores en los extremos deberán arrojarse la pelota evitando que el jugador del medio (quien hace de “perrito”) lo alcance. Si en algún momento el perrito se hace con la pelota, el jugador responsable pasará al medio y el juego reinvDominó. Este juego tradicional requiere de veintiocho fichas de mármol blancas o negras rectangulares con diversos puntos marcados en sus extremos, de manera que cada una tenga un número del 1 al 6 asignado en cada punta. Las fichas se colocan boca abajo y se mezclan, luego se reparten entre 2 o 4 jugadores, hasta tener cada uno siete. Las reglas del juego varían de acuerdo a la región, pero el cometido del juego suele ser quedarse sin fichas antes que los demás, jugando una por turno formando una cadena con las de los demás, pareando los números semejantes.
Los atados. Este juego requiere de un grupo grande para practicarse. Un elegido se posiciona de espaldas al grupo mientras los demás se toman firmemente de las manos formando una cadena. Entonces los punteros de la cadena deberán moverse entre los eslabones sin soltarse ni interrumpir la cadena, hasta quedar atados o enredados. Entonces el elegido debe voltear e intentar desanudar la cadena sin romperla.
La “mancha”. Conocido con muchísimos nombres a lo largo del mundo, este es el clásico juego de persecución en que un individuo debe correr detrás de otro u otros hasta alcanzarlo y, entonces, cambiar posiciones. Es un clásico juego infantil que sin embargo es muy practicado entre atletas adultos, pues fomenta la resistencia física y la velocidad.
STOP. Para jugar STOP se requiere de papeles y lápices, así como dos o más jugadores. Cada uno tendrá un lápiz y un papel, en el cual trazará una serie de columnas a convenir: la primera necesariamente será para las letras de juego, y las siguientes para color, marca, animal, país y otras categorías que los jugadores pacten. Una vez lista la hoja, elegirán por turnos una letra del abecedario y deberán escribir en cada columna un nombre de país, de color, de marca, etc. que inicien con dicha letra. Cuando algún jugador complete todos los renglones dirá en voz alta “STOP” y nadie más podrá escribir en su hoja. Entonces se leerán las palabras del ganador, y por cada una obtendrá 100 puntos o 50 puntos si algún otro jugador logró escribirla también.
El perrito. Este juego requiere de una pelota de alguna naturaleza. Los jugadores deberán ser tres como mínimo: dos a los extremos del espacio de juego y uno en el centro. Los jugadores en los extremos deberán arrojarse la pelota evitando que el jugador del medio (quien hace de “perrito”) lo alcance. Si en algún momento el perrito se hace con la pelota, el jugador responsable pasará al medio y el juego reiniciará.