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Respuesta:
1. Se fijan metas
Cuando una persona se sienta a leer un buen libro, automáticamente se fija una meta. Ya sea leer un determinado número de páginas antes de realizar otra actividad, o leer hasta que cierto concepto se haya asentado en su mente, los lectores tratan de cumplir ciertos objetivos al comenzar un texto. Fijarse metas para todos los ámbitos de su vida y trabajar hasta alcanzarlas es indudablemente una característica de la gente exitosa.
2. Aprovechan el tiempo
Aunque solo dispongan de 15 minutos antes de tener que estar en algún lugar aprovechan ese corto tiempo leyendo. Los individuos que alcanzan el éxito ven el tiempo como algo increíblemente valioso y aprovechan cada oportunidad que se les presenta para aprender algo nuevo. Los lectores saben que 5 minutos perdidos cada día, durante un año, representan 24 horas que podrían haber pasado con un buen libro.
3. Son capaces de hablar y escribir con fluidez
No es ninguna sorpresa que los oradores más destacados de la historia hayan sido adeptos a la lectura. Las personas exitosas obtienen inspiración de sus referentes, y emplean esta inspiración para colaborar con su causa. Las personas que han quedado grabadas en la historia por sus discursos, como Lincoln y Nelson Mandela, se convirtieron en grandiosos disertantes, en parte, gracias a la lectura y el estudio de las grandes mentes de su tiempo.
4. Son capaces de concentrarse
Una cualidad de las personas exitosas es que pueden concentrarse en una tarea por un largo período de tiempo. Cualquiera que haya leído libros extensos puede afirmar que aquello no se trata de un proceso rápido e instantáneo, como tampoco algo que se realice en una sola sentada. Aunque los lectores se toman pausas, los realmente voraces no pueden soltar un libro por más de un día una vez que están inmersos en él. Las personas exitosas sienten lo mismo por cualquier tarea que se hayan propuesto llevar a cabo.
5. Tienen la mente abierta
Las personas exitosas son capaces de ver un problema desde distintos ángulos, ya que han conocido numerosas perspectivas a través de la literatura. Ser un lector voraz permite ponerse en los zapatos de otra persona, lo que resulta en enseñanzas para toda la vida.
6. Se mantienen lúcidos
Al igual que correr mantiene las piernas tonificadas, leer es un ejercicio que mantiene en forma la mente. Cuanto más lees, más información procesa tu mente, por lo que será más ágil y capaz de retener conocimientos. Las personas exitosas ejercitan su mente diariamente mediante la lectura y otros recursos como la realización de crucigramas y juegos de ingenio. Estos pequeños desafíos autoimpuestos mejoran notoriamente la capacidad de derribar obstáculos y resolver problemas en el día a día.
7. La lectura es su pasatiempo
Incluso las personas más exitosas precisan desconectarse del mundo de vez en cuando. Sin embargo, esto no significa “desactivar” sus mentes del todo. No hay nada malo en leer una revista frívola o una novela ligera para relajarse. Leer de todo es más beneficioso para la mente que mirar la televisión o pasar horas en las redes sociales. Apuntar a mejorar y ejercitar el cerebro incluso en los ratos libres es algo que las personas exitosas suelen compartir.
8. Tienen más memoria
Los lectores realmente comprenden cuán poderoso es el cerebro humano, ya que puede almacenar una cantidad de información prácticamente ilimitada. Cuanto más lees y aprendes, más fácil es retener información. Por lo tanto, continúan leyendo, expandiendo su conocimiento y en consecuencia incrementando su memoria.
9. Están informados
Algunas personas escalan hasta la cima porque han aprovechado su tiempo leyendo. Cuando se embarcan en la lectura de un libro, no lo hacen solamente para terminarlo, sino para obtener algo de ello. Para estas personas, leer libros de texto en el colegio nunca fue simplemente un vehículo para aprobar los exámenes, sino una forma de expandir aún más su conocimiento. Incluso al leer novelas de ficción tratan de obtener enseñanzas que las acompañarán para siempre.
Respuesta:
Además de alimentar la imaginación y favorecer la concentración, la lectura ayuda a mejorar algunas habilidades sociales, como la empatía.
Explicación:
Un ávido lector rápido aprende a identificarse con los personajes de las historias que lee y, como bien sostiene Emili Teixidor, “está más dispuesto a abrirse a otras vidas”.