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Respuesta:
¿Habrá algo más hermoso que regalar tu tiempo para ayudar a los demás?
Actualmente vivimos en tiempos de crisis, nos referimos a tipo de crisis sociales, ejemplos de éstas son: Crisis económicas, crisis de pobreza, crisis familiares, crisis emocionales, y podría seguir mencionando más ejemplos.
Sin embargo hay algo que preocupa y que debe considerarse ya que nos atañe a todos, la crisis de ayuda social, una solución desde nuestro punto de vista con respecto a las crisis mencionadas anteriormente pueden ser resueltas en un 60% con el servicio de ayuda, desde ayuda comunitaria hasta ayuda personal.
La mayoría de la gente piensa ¿por qué ayudar a los demás, si yo me encuentro bien? , que pensamiento más egoísta, aparentemente si, puede ser,que esa persona se encuentre bien por el momento, pero es inevitable que en algún determinado tiempo está persona necesite de la ayuda de los demás, vamos, somos seres humanos nuestra vida depende de la relación con los demás, de la ayuda de los demás. Desde la elaboración de productos para comer hasta para soluciones jurídicas, incluso para sentir compañía e integridad en un grupo.
El ser humano es social por naturaleza, desde que nacemos interactuamos con el medio ambiente y otras personas, que nos van educando y enseñando para tener un pleno desarrollo humano.
Se deja en claro, que la importancia de ayudar es fundamental, “el dar sin recibir nada a cambio”, sin embargo la ayuda siempre será recíproca, es decir hoy hago algo por una persona, y el día de mañana alguien hará algo por mí. Santo Tomás de Aquino dice esta frase “Lo que se recibe, se recibe al modo del recipiente” si tu ayudas y eres noble obtendrás cosas similares.
Ayudar a los demás en estos tiempos, se relaciona con que es solo ayudar en momentos de crisis, cuando no debe ser así, no debemos esperar a que haya crisis o pase una catástrofe para poder ayudar, también ya no es muy común la ayuda voluntaria, ser voluntarios implica tomar conciencia de que somos una sociedad, siempre es mejor y se realiza mejor la cosas cuando son cuatro manos y no sólo dos. No hay mejor satisfacción que saber ayudé a alguien más, a alguien que necesitaba mi ayuda y que en el futuro no sé si necesite de él o de alguien más.
Pero cabe mencionar también esta otra frase “que lo que haga tu mano izquierda, no lo sepa tu mano derecha”, es decir que realmente lo que hagas para ayudar a los demás te nazca de corazón, no con el reconocimiento de los demás, una frase que Mario Benedetti nos aporta “¿si el corazón se cansa de ayudar, para qué me sirve?”. Si también ayudar es una forma de amar.
Ahora regresando a la pregunta sobre la frase inicial, ¿Habrá algo más hermoso que regalar tu tiempo para ayudar a los demás? A lo que respondemos, Por supuesto que hay algo más hermoso: El agradecimiento y la sonrisa de quien pudiste ayudar.
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