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Bogotá, 19 nov (EFE).- El Centro Nacional de Memoria Histórica presentó hoy un informe llamado "Guerrilla y Población Civil. Trayectoria de las FARC 1949-2013", en el que analiza la evolución de las relaciones entre estos dos actores en el largo conflicto armado colombiano.
El documento fue publicado hoy en Bogotá al cumplirse el primer aniversario de las negociaciones que el Gobierno y las FARC llevan a cabo en La Habana con el objetivo de poner fin a un conflicto armado que ha azotado a Colombia durante medio siglo.
El estudio señala que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), nacidas en 1964, se desplegaron "como producto y a la vez como herederas de las luchas agrarias" surgidas en este país durante los años anteriores, y es por eso que en su fase originaria, esta guerrilla se reconoce "como una fuerza defensiva".
El arraigo campesino de las FARC era tal, que "desde los ámbitos urbanos" se las percibió "como voceras (portavoces) del viejo país rural", en contraste con otras guerrillas surgidas en el clima político de la Guerra Fría y la Revolución Cubana, como el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
En el informe se constata que fue precisamente este sustrato campesino el que hizo que las FARC, más silenciosas y relegadas a las periferias, resistieran con mayor eficacia el accionar del Estado y las políticas contrainsurgentes.
El quiebre de guerrilla, de agredida a agresora, se dio, paradójicamente, con un contexto internacional adverso producido por la caída del Muro de Berlín y el declive insurgente en Centroamérica.
Fue entonces cuando las FARC se aproximaron a los circuitos de las drogas ilícitas, "inicialmente de forma vergonzante y luego abiertamente", según afirma en el prólogo Gonzalo Sánchez, director del Centro de Memoria.
Para los investigadores, el acceso de las FARC a esta fuente de financiación, el avance del paramilitarismo y el apoyo estadounidense al Estado a través del Plan Colombia, produjo un proceso de "modernización y barbarie" de la guerra.
"La confrontación elevó despiadadamente los sufrimientos de la población civil, atrapada en el fuego cruzado de insurgentes, paramilitares y agentes del Estado", reseña el informe.
El documento afirma que las claves del "éxito relativo de las FARC", así como su "declive militar y político reciente", están en sus complejas relaciones con la población civil, ya que "fueron voceras y la expresión armada de reclamos campesinos en sus tempranos años".
En la época de su máximo esplendor, las FARC también fueron "proveedoras de seguridad de muchas comunidades agrarias", "reguladoras de conflictos y dispensadoras de sanciones", así como "recaudadoras de contribuciones más o menos forzosas".
Y el declive, según el informe del Centro Nacional de Memoria Histórica, llegó con los "hostigamientos sistemáticos a la población civil" y el ejercicio de "prácticas como masacres, minas antipersonales, tomas violentas de pueblos", así como la más impopular de todas: "el uso indiscriminado del secuestro".
"Su accionar invadió la vida cotidiana de regiones y poblaciones, a veces como autoridad de facto y otras como fuerza de ocupación", agrega el documento sobre el accionar de la guerrilla en zonas pobladas.