Respuestas
Respuesta:
Había una vez : Un niño que Se llamaba Juan era pobre y su único alimento era una vaca con la que alimentaba a el y a su madre.
Un día: Un día decidió vender la vaca fue al mercado y encontró a un señor de tercera edad y Juan le dijo que vendía la vaca para conseguir otra vaca que tuviera leche ya que la que tenía estaba por acabarse la leche ya que el era pobre y el anciano le dijo que le daba 3 frijoles mágicos y Juan aceptó asi que fue a sembrar las semillas su madre lo regaño todo por vender la vaca por frijoles mágicos el estaba triste y se fue a dormí
Luego : Al siguiente día el vio que los frijoles habían nacidos gigantes y Juan escaló por curiosidad y lo que vio fue a un gigante y Juan del miedo corrió le hizo una trampa al gigante y el gigante cayó en la trampa y cayó al río y se ahogó.
Finalmente: El bajo de la planta de frijoles se llevó las riquezas del gigante y sorprendió a su madre con las riquezas, cortó las plantas y vivió feliz por siempre no volvió a hacer pobre.
Listo te ayude espero te sirva , ya te respondí como te dije yo cumplo.
Respuesta:
Cuento en tercera persona omnisciente:
Había una vez en cierto lugar del mundo, una familia de perritos muy particular; Madre, padre y sus dos retoñitos, una hembra y un machito. Los perritos eran bastantes felices viviendo juntos en la casa de una pareja de ancianos que los querían mucho.
Un día, en una noche oscura y lluviosa sucedió algo desagradable, los dos ancianos fallecieron debido a un accidente dentro de la casa. La familia de perritos se sentía muy triste pues se preguntaban y ahora quién los cuidaría y se encargarían de ellos.
Luego de aquel triste y desagradable sepulcro de sus dueños, apareció de repente una señora muy bonita y elegante, para su sorpresa era la hija de sus difuntos ancianos quién llegó a hacerse responsable de los bienes de sus padres y por tanto de todo aquello que ellos en vida amaron y cuidaron tanto, entre ellos a los huérfanos perritos quienes se sintieron felices y afortunados de saber que ya no iban a quedar solos y desamparados o tal vez deparados el uno del otro.
Finalmente aquella bonita señora decidió llevarse a la familia se perritos a su casa donde les brindó techo, cobija, comida y mucho cariño. Desde entonces los perritos volvieron a vivir tranquilos, sin preocupaciones y sobre todo, llenos de amor.
Explicación: