3. INVESTIGA LAS FUNCIONES DEL LENGUAJE:
FUNCIÓN REPRESENTATIVA O REFERENCIAL- FUNCIÓN EMOTIVA O EXPRESIVA-FUNCIÓN
APELATIVA- FUNCIÓN ESTÉTICA O POÉTICA-FUNCIÓN FÁTICA Y DA UN EJEMPLO PARA CADA UNO.
4. INVESTIGA UNA NORMA O REGLA DE ORTOGRAFÍA Y SUS RESPECTIVOS EJEMPLOS.
Respuestas
Respuesta:
Función referencial, representativa o informativa
Es aquella donde el emisor elabora mensajes relacionados con su entorno o con objetos externos al acto comunicativo. Es el tipo de función característica de los contextos informativos, o de los discursos científicos o divulgativos, enfocados en transmitir conocimiento.
ejemplo: El teléfono no sirve. Otra vez llueve.
La función emotiva o expresiva es la función del lenguaje que se centra en el emisor, ya que le permite exteriorizar sus propios sentimientos, deseos, intereses y opiniones.
Por ejemplo: Me parece genial / ¡Un gusto conocerlo! ... El emisor intenta influir en la conducta del receptor.
La función apelativa o conativa es un tipo de función del lenguaje empleada con el propósito de llamar la atención de un receptor para obtener de su parte una respuesta o inducir una reacción.
Por ejemplo, cuando una persona dirige a otra una pregunta por la que espera una respuesta, se habla de función apelativa
La función poética (también llamada función estética) es la que se utiliza para producir una sensación estética de agrado, belleza o gracia. Por ejemplo: Brillaba la luna en tus ojos. ... También es común el uso de esta función en las publicidades comerciales y en el habla popular.
Tiene lugar cuando el emisor quiere que el receptor centre su atención en la forma del mensaje. Para ello se sirve de recursos retóricas, siendo el objetivo del mensaje el producir belleza.
La función fática o función relacional es la función del lenguaje que se centra en el canal de comunicación, ya que se utiliza para iniciar, finalizar, prolongar o interrumpir una conversación.
Por ejemplo: Hola, ¿me escuchas bien?
NORMA O REGLA DE ORTOGRAFÍA Y SUS RESPECTIVOS EJEMPLOS
Un ejemplo de regla ortográfica es aquella que indica que, después de la letra M, se escribe la letra B y no la V. Por eso debemos escribir “también”, “cambiar” y “tambor”, y no “tamvién”, “camviar” o “tamvor”.