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Respuesta:
En el departamento de La Guajira viven más de 500.000 personas que pertenecen a varias culturas indígenas, árabe y criolla. Permanentemente hay un flujo de personas que por alguna razón visita o sale de La Guajira, ya sea por turismo, comercio o explotación de recursos minero energéticos. Así mismo, La Guajira recibe una corriente migratoria derivada de los procesos de violencia que vive el país, que busca condiciones de paz, trabajo y bienestar.
La Guajira es multilingüe y pluricultural. Cinco grupos indígenas residen entre la pampa y las montañas: wayuu, kinqui, ika, kogui y wiwa; los criollos viven principalmente en los asentamientos urbanos y los euro-asiáticos: árabes o “turcos”, en Maicao.
Los wayuu o guajiros
Representan el 38% de la población del departamento de La Guajira. Es una población binacional de aproximadamente 440.000 personas (en Venezuela unas 255.000 y 185.000 en Colombia); por número de miembros, es el grupo más importante tanto en uno como en otro país. Se les encuentran en casi todo el territorio, especialmente en la pampa Guajira. Se les reconoce como wayuu “persona” y la sociedad nacional, hasta hace pocos los llamaban guajiros. Hablan Wayuunaiki.
El tejido ha sido tradicional entre los wayuu, labor que combinan con sus actividades cotidianas, en los ratos libres, durante las visitas y cuando van de viaje, desde hace siglos. Conservan ritos de iniciación en este arte. Quien es hábil tejiendo digna de respeto y quien posee muchas y finas piezas tejidas adquiere poder y prestigio.
Los criollos
Personas de orígenes diversos, mezcla de indígenas, blancos y negros. Constituyen el 58% de la población departamental, habitan especialmente los asentamientos urbanos. Dentro del variopinto caribe se destaca el criollo guajiro por la marcada influencia cultural indígena.
El costero en la Media y Alta Guajira se ha dedicado históricamente a la actividad comercial y por tal razón a trabajos de coyuntura. Aprovecha las “bonanzas” generadas por la geopolítica departamental: el provinciano en la Baja Guajira es agricultor y ganadero, fuentes de los cantos de vaquería, raíz de la música de acordeón.
Los kaggaba o kogui
Ocupan las vertientes norte y suroriental de la Sierra en La Guajira, Magdalena y Cesar. El 80% habita en La Guajira, en la razón de los ríos Palomino y Ancho, y representan el 3% de la población de este departamento.
Se identifican como kaggaba “gente” y se les conocen como kogui. Su lengua es la Kaggaba.
Los demás indígenas de la Sierra los consideran seres superiores en sabiduría y conocimiento. En su comunidad llaman nani “hermanitos menores” a la gente del resto del mundo.
Los wiwa, arsarios sanka o malayos
Pueblan la vertiente suroriental del macizo en los departamentos de Cesar, Magdalena y La Guajira, en donde se encuentran unos 3.000. Se llaman así mismo wiwa, originario de tierra cálida, aunque se les conozca como arsarios de la Virgen del Rosario o sanka. Hablan damana.
Este es el grupo menos conocido de los existentes en la Sierra. La tierra se hereda de madre a hija. Tradicionalmente, el Mama ha dirigido la sociedad wiwa; su autoridad abarca todas las dimensiones de la vida social e individual. Mama quiere decir sol, abuelo, consejero; su mujer debe ser saga, luna, abuela, consejera; ambas reciben educación especial y, por ejemplo, nunca prueban sal ni alimentos con esta sustancia. Comparten poderes exotéricos.
Los ika, arhuacos o bintukua
Están en la vertiente occidental (Cesar y Magdalena) y en un número menor de 2.000 habitantes, en las vertientes norte y nororiente en el departamento de La Guajira. Junto con los wiwa representan el 1% de la población. Se autodenominan ika “persona” y son conocidos como Arhuacos o bintukua. Su idioma es el ika.
Solo el varón usa la coca que la mujer cosecha; la procesa en el poporo agregando cal (de conchas marinas tostadas al fuego) y las revuelve con un palito. El poporo, calabaza en forma de pera, es un símbolo sexual que el Mama entrega al varón cuando llega a la adultez; El calabazo representa a la mujer y el palito al varón.
Respuesta:
Explicación:INFORME DE LA PROCURADURÍA GENERAL DE LA NACIÓN
LA GUAJIRA:
Pueblo Wayúu, con hambre de dignidad, sed de justicia y otras
necesidades insatisfechas
Bogotá, junio de 2016
LA GUAJIRA:
Pueblo Wayúu, con hambre de dignidad, sed de justicia y otras necesidades insatisfechas
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Procuraduría Delegada para la Defensa de los Derechos de la Infancia, la Adolescencia y la Familia. Carrera 5ª
No. 15 -80, piso 14. PBX: 587-87-50. Extensión 11428
Procuraduría Delegada para la Defensa de los
Derechos de la Infancia, la Adolescencia y la
Familia
ILVA MYRIAM HOYOS CASTAÑEDA
Procuradora Delegada
Coordinadora:
María Clara Velandia Arango
Grupo de trabajo:
Esperanza Fernández Fernández
José Leonardo Angarita Rodríguez
Carlos Alberto Barón Cruz
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TABLA DE CONTENIDO
Introducción 5
1. Contexto Regional 7
a. Límites 8
b. División territorial 8
c. Población 8
d. Regiones Naturales 10
e. Sistemas Ecológicos 10
f. Economía 10
1.1. Sobre la etnia Wayúu 10
2. Diagnóstico de la situación de La Guajira 12
3. Protección de los niños y las niñas 13
3.1 Marco Normativo
Internacional 13
Nacional 15
4. Acciones de la Procuraduría Delegada para la Defensa de los Derechos de
la Infancia, la Adolescencia y la Familia (años 2012 -2015), para garantizar
los derechos de los niños, las niñas y los adolescentes de La Guajira 17
5. Medidas Cautelares No. 51 de 2015, adoptadas mediante Resolución 60 de
11 de diciembre del mismo año, por la Comisión Interamericana de
Derechos Humanos 26
5.1 Antecedentes 26
5.2 Solicitud de revocatoria de las Medidas Cautelares presentada por el
Viceministro de Asuntos Multilaterales del Ministerio de Relaciones
Exteriores 28
6. Seguimiento de la Procuraduría Delegada para la Defensa de los Derechos de
la Infancia, la Adolescencia y la Familias a las Medidas Cautelares No. 51 de
2015, otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos 32