Respuestas
Respuesta:
Cuenta la fábula que un elefante extraviado llegó a un precipicio y se detuvo frente a un puente frágil hecho de madera. Titubeó unos instantes pues era consciente de su gran peso y después de pensarlo muy bien decidió valientemente caminar sobre aquella debíl estructura. A cada paso que el elefante daba el puente crujía fuertisimo y se balanceaba de un lado a otro por aquel peso desmesurado.
El elefante miraba al frente; tenía que llegar al otro lado, era la única opción de encontrar a su manada. Fueron momentos de mucha tensión pero su meta le daba fortaleza para seguir adelante. Por fin y tras unos minutos que se hicieron eternos para el elefante llegó al otro lado del precipicio… y estando a salvo sintió la alegría del vencedor.
De repente, sin esperarlo de su oreja salió una pulga que exclamo !Oye gordo…. fue increible como hicimos temblar ese puente, valió la pena el esfuerzo viejo!
Muy sorprendido por las palabras de la pulga le dijo ¿en que momento te esforzaste para sentirte triunfador? ¿de verdad te sientes victorioso con mi esfuerzo y tu ausente valor… crees que tu también moviste el puente?… Pulga… solo te veo ahora que ya todo el riesgo paso.
La soberbia tiende a hablar más de la cuenta de si mismos, se jacta de si para deslumbrar a los desprevenidos, celebra para si los triunfos de su prójimo y juzga/critica y condena las fallas de otros porque es incapaz de sacar su propia viga, antes de sacar la viga de otro.
Pero ¿Hasta donde hemos, somos o podemos llegar a ser contagiados por este virus? Se ha dicho “dime con quien andas y te diré quien eres”
Dios nos manda a rodearnos de gente que comparta nuestros propósitos, porque el que con lobos anda ahuyar aprende. Debemos cuidarnos de este mal, ser roca sólidas, sensibles a las
actitudes y características de este veneno que desagrada a Dios, es necesario hacer un chequeo consciente de nuestro comportamiento para ver si en nosotros no hay actitud de altivez, porque es muy fácil padecer de este, reconocerlo en otros, pero no en nosotros pues también causa ceguera. Si
te sientes estancado, haces y haces y no te sientes avanzar/crecer, revisa tus actitudes, esta es una buena señal de ello, pues la soberbia es también un impedimento para tu crecimiento personal y espiritual, Dios reviste de gracias al humilde, y el que posee la gracia Divina es también edificado y respaldado por Dios
Respuesta:ffff
Explicación:
mal