Respuestas
Respuesta: correr
Se define deportivamente como un paso en el cual en un determinado momento ninguna de las extremidades motrices se encuentran en contacto con el suelo.
Dicho de una persona: Andar rápidamente y con tanto impulso que, entre un paso y el siguiente, quedan por un momento ambos pies en el aire.
Correr es la manera más rápida de desplazamiento a pie de un animal o de una persona.
A la acción y efecto se denomina carrera.
Esta actividad es una forma de ejercicio aeróbico tanto como anaeróbico.
Beneficios
Actualmente, solo pocos trabajos o empleos requieren de una actividad física vigorosa. La gente normalmente conduce su auto o viaja en transporte público y ve televisión durante su tiempo libre en lugar de realizar una actividad física.
Las evidencias sugieren que si las actividades de intensidad moderada a leve se hace diariamente, ello ayuda a disminuir los riesgos de una enfermedad cardiovascular.
Tales actividades incluyen caminar, subir escaleras, jardinería, trabajo doméstico de moderado a pesado, bailar, correr y ejercicio en casa.
Un ejercicio más vigoroso como el correr puede ayudar a mejorar las condiciones del corazón y los pulmones lo cual puede proporcionar aún más beneficios consistentes para disminuir los riesgos de las enfermedades cardiovasculares.
Los ejercicios aeróbicos ponen en condición su corazón y pulmones, si se efectúan con la adecuada intensidad por lo menos 30 min., de 3 a 4 veces por semana.
A muchos de vosotros os sonarán estas dos palabras que a menudo se suelen utilizar en gimnasio, revistas y charlas deportivas. Los conceptos aeróbico y anaeróbico hacen referencia a la manera que tiene el organismo de obtener la energía: con necesidad de oxígeno (aeróbico) y sin necesidad de oxígeno (anaeróbico). Aunque no todo es blanco o negro, siempre intervienen los dos pero con predominancia de unos de ellos, por eso se debe de decir que un ejercicio es predominantemente aeróbico o anaeróbico.
Ejercicio aeróbico: son ejercicios de media o baja intensidad y de larga duración, donde el organismo necesita quemar hidratos y grasas para obtener energía y para ello necesita oxígeno. Son ejemplos de ejercicios aeróbico: correr, nadar, ir en bici, caminar, etc. Se suele utilizar a menudo para bajar de peso, ya que como hemos dicho, con este tipo de ejercicio se quema grasa. También, al necesitar mucho oxígeno, el sistema cardiovascular se ejercita y produce numerosos beneficios.
Ejercicio anaeróbico: son ejercicios de alta intensidad y de poca duración. Aqui no se necesita oxígeno porque la energía proviene de fuentes inmediatas que no necesitan ser oxidadas por el oxígeno, como son el ATP muscular, la PC o fosfocreatina y la glucosa. Son ejemplos de ejercios anaeróbicos: hacer pesas, carreras de velocidad y ejercicios que requieran gran esfuerzo en poco tiempo. Este tipo de ejercicios son buenos para el trabajo y fortalecimiento del sistema musculoesquelético (tonificación).
La elección de un tipo de ejercicio depende de los objetivos que se tengan, aunque en el ámbito de la salud es recomendable alternar y complementar ambos tipos de ejercicios, ya que se conseguirán beneficios cardiovasculares y musculares. Ya en temas de rendimiento se suele dar más importancia a uno de los tipos según la finalidad, aunque sin olvidarnos del otro.