Respuestas
En el plano económico, se incrementó de forma sustancial el rendimiento del trabajo, a la vez que disminuyó el coste de producción. Producir cualquier bien era mucho más económico que antes, lo que hizo que las naciones industrializadas generan una riqueza enorme.
A su vez, se acumularon grandes capitales que formaron grandes compañías y sociedades anónimas que tenían como base la industria. Rápidamente florecieron las cámaras de comercio, los bancos y las compañías de seguros. Las nuevas empresas necesitaban créditos, cosa que les garantiza la banca.
Las demandas productivas surgidas tras la Revolución Industrial propiciaron que se diseñaran, desarrollaran y perfeccionaran las vías de comunicación y los medios de transporte entre los distintos países.
El capitalismo se extendió como la pólvora y supuso el fin de otras fórmulas económicas que habían existido desde la época feudal, así como de la artesanía y la manufactura, que fueron desapareciendo progresivamente.
En el plano social, la mayor repercusión cayó sobre Gran Bretaña. Allí se culminó el proceso de desaparición del campesinado, que encontró un rival muy poderoso: las grandes ciudades.
Estas eran los centros de referencia de la industrialización, por lo que la población abandonaba el campo para trasladarse a grandes núcleos urbanos, lo que impulsó un cambio en la estructura profesional de la población, que ahora estaba empleada de forma masiva en las diferentes ramas de la industria.