Respuestas
Respuesta:
Desde el inicio de la Guerra Fría, el gobierno norteamericano desarrolló un proyecto que se denominó "La Diplomacia del Jazz". El Departamento de Estado organizó visitas de buena voluntad, enviando a músicos de la talla de Louis Armstrong, Benny Goodman y Duke Ellington a giras por Europa del Este, Medio Oriente y el sur asiático. El objetivo: mostrar las libertades culturales estadounidenses a través de su música. Era una jugada muy necesaria, sobre todo para contrarrestar la propaganda soviética que pintaba a los Estados Unidos como un país culturalmente bárbaro y racista. Además, si los soviéticos se paseaban por el mundo con su Ballet Bolshoi, ¿por qué ellos no lo harían con el Jazz?
Otro punto a favor era que la mayoría de bandas de jazz eran multiraciales, un potente símbolo a finales de los años 50, cuando la segregación en los estados del sur empañaban la imagen de todo el país.