Respuestas
Respuesta:
Titanes a veces encarnan
para progreso de la civilización,
uno de ellos nació en Sudamérica:
Simón Bolívar se le bautizó.
Entre calma y amor pasaron los años,
pero en su YO algo explotó,
neuronas y carácter se fusionaron
para parir a este punzón.
De origen aristócrata, pero sentir de pueblo,
con tesón constante, vástago de saber y justicia,
la silueta elegante se levanta del lodo
y grita la verdad revelada:
¡somos hermanos e hijos del mismo Dador!
Bautizo de fuego y sangre,
recepción en la milicia,
con talento innato y disciplina
su integridad empezó.
Entre aceros que tocan la marcha,
con mano firme y vista candente,
avanza triunfante la legendaria figura
ante el poderío español humillante.
Bolívar: juraste hacer de América libre,
decretaste alcanzar esa estrella,
y no obstante traición y envidia
la lealtad a la verdad te salvó.
Simón Bolívar, el hijo de Caracas,
el siervo de América,
padre de una sola nación:
Bolivia, Colombia, Ecuador,
Panamá, Perú y Venezuela
te deben su libertad a ti hermano mayor.
Tus demonios internos te alcanzaron,
así la enfermedad te sentenció,
la tuberculosis menguó tu materia,
pero la vida te inmortalizó.
Tu efigie custodia plazas y llanos,
leyenda y canción tu valor,
eres profeta por tus enseñanzas
e incubas en la utopía del soñador.
El futuro habló por tus venas:
en calles y mares de toda América
fraternidad y unidad reinen por siempre.
¡Viva Bolívar y sus enseñanzas!
¡Vida eterna a este campeón!
¡Gracias te damos, oh Gran Maestro,
por tu sacrificio y noble amor!