Cuáles son los criterios que utilizan la ONG y las naciones unidas para evaluar el progreso de una comunidad en términos de derechos humanos
Respuestas
Respuesta:
En los albores del nuevo milenio, los derechos humanos y el desarrollo se encuentran en una encrucijada. Por un lado, el grado de
congruencia entre los derechos humanos y la teoría del desarrollo
es más impresionante que nunca. La pobreza y las desigualdades
entre países y dentro de los países son los más graves problemas
de derechos humanos a que nos enfrentamos hoy en día. Como
subrayó el Secretario General en su informe de 2005 sobre la
reforma, “Un concepto más amplio de la libertad”, los retos de
los derechos humanos, el desarrollo y la seguridad están tan íntimamente ligados que ninguno de ellos puede acometerse con
eficacia por separado.
Los organismos de las Naciones Unidas han hecho grandes progresos en la traducción de esas realidades en la práctica, entre
otras cosas mediante la definición de un criterio común respecto
del enfoque basado en los derechos humanos en la cooperación
para el desarrollo, incorporado en las directrices comunes de programación de las Naciones Unidas. Además, en la Cumbre Mundial
celebrada en septiembre de 2005, los Estados Miembros de las
Naciones Unidas dieron una impronta y un impulso políticos sin
precedentes a los esfuerzos de la Organización por conseguir que
los derechos humanos pasen a la primera línea y al centro de toda
su labor, un compromiso colectivo que estoy firmemente decidida
a apoyar por conducto de mi “Plan de Acción” de 2005.
Explicación:
Los derechos humanos internacionales están reconocidos universalmente con independencia de las diferencias culturales, pero su
aplicación práctica sí exige sensibilidad respecto de la cultura.
Las normas internacionales de derechos humanos tienen un fuerte
carácter de universalidad y son considerablemente adaptables
a distintos contextos culturales. El Artículo 1 de la Declaración
Universal de Derechos Humanos afirma lo siguiente: “Todos los
seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos”.
Los derechos humanos son inherentes a la persona e inalienables,
y le corresponden simplemente por el hecho de ser persona. La
persona a la que van asociados no puede renunciar a ellos voluntariamente. Otras personas no pueden despojarla de ellos.
Todos los países han ratificado al menos uno de los siete tratados
fundamentales de las Naciones Unidas en materia de derechos