Respuestas
Respuesta:
La crisis financiera ha impactado a todos los países, sus consecuencias son
grandes, graves y diversas. Sus efectos se expresan en la economía real, en la
pérdida de oportunidades para la reducción de la pobreza, en la caída del
comercio exterior y del Producto Interno Bruto (PIB), en las dificultades para
continuar con los planes de inversión, en la creación de nuevas políticas de
bienestar, en el desempleo y lo más probable es que también se manifieste en el
terreno político, generando problemas de gobernabilidad en los países
democráticos, en especial aquellos que han mantenido tensiones políticas y
sociales en los últimos años.
Cabe destacar que en distintos países en el mundo han tomado medidas que
buscan mitigar los efectos de la crisis financiera y proteger a sus respectivas
economías. Al respecto se puede señalar que en México se encuentra en mejores
condiciones de enfrentar esta crisis de lo que se estuvo en las crisis anteriores,
durante los años del 2000. Sin embargo, cada uno de los planes, como
corresponde, posee un fuerte sello económico y financiero pero no se explicitan
medidas equivalentes en el terreno político, o en el de la protección social. Estas
requieren de acuerdos nacionales específicos y, quizás, esta es una de las
mayores vulnerabilidades que se visualizan en los países: concertar entre la
administración y el Congreso, establecer mesas de diálogo en las cuales puedan
participar los diversos actores; establecer conversaciones con los partidos
políticos en la búsqueda de posiciones que vayan más allá de la coyuntura en una
perspectiva de largo plazo.
Las fragilidades de la crisis en el país se manifiestan en las dificultades para
concertar políticas que posean un carácter de Estado, es decir, capaces de reflejar
el conjunto de voluntades de los diversos actores en el ámbito nacional. De igual
forma estas dificultades de concertación y coordinación se expresan también a
nivel regional en donde no se han logrado construir visiones compartidas
Explicación:
enfrentar la crisis. Más aún, en muchos casos han surgido respuestas que apelan
más al proteccionismo.
Una medida que ha aplicado México para frenar la crisis es la concentración de un
el federalismo fiscal que se ha caracterizado por la centralización de los ingresos
y gastos públicos en el gobierno federal, lo que se ha reflejado en la escasez de
recursos de las entidades y los municipios del país.