Respuestas
Respuesta:
En el interior del cuerpo se producen respuestas químicas como consecuencia de varias situaciones relacionadas con el amor, lo que prueba que los sentimientos pueden demostrarse con la bioquímica.
Explicación:
El amor es un tema de interés para todos, toma el protagonismo en toda conversación y, de cierta manera, todas las personas en algún momento de sus vidas lo buscan, tanto así que es el centro de investigaciones científicas muy importantes.
La ciencia ha podido demostrar los cambios físicos y químicos que ocurren durante el enamoramiento. Los síntomas externos del amor son bastante conocidos; cuando se está frente a la persona por la cual se siente atracción, las mejillas se enrojecen, las manos sudan y se aceleran los latidos del corazón debido a que se libera adrenalina y dopamina (se encarga de los sentimientos de satisfacción y placer), sustancias que elevan la tensión arterial. Los latidos pueden aumentar a 120 pulsaciones por minuto aproximadamente, siendo 70 a 100 pulsaciones la normalidad.
Según el doctor Hernán Aponte, profesor de Urología en la Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud – Fucs, “el amor es un proceso que se construye paso a paso, en el cual se producen una serie de reacciones químicas y en el que intervienen diferentes partes del cerebro”. Este proceso se puede explicar mediante la pirámide del amor, propuesta realizada hace unos años por los profesores de la Fucs, Alonso Acuña Cañas y Pedro Guerrero González.
Sustancias como la norepinefrina, la dopamina y la serotonina son consideradas como los primeros neurotransmisores que intervienen en la respuesta sexual. Posteriormente se liberan los neurotransmisores secundarios, como la oxitocina y la vasopresina
La primera etapa se denomina el enamoramiento, la pasión, que es un estado de intensa atracción sexual en el cual, actúa el cerebro primitivo, hay gran liberación de los neurotransmisores primarios, produciendo un estado de bienestar y placer mediado por la dopamina, pensamientos y conductas obsesivos por el ser amado, perdida del juicio crítico, dificultad para conciliar el sueño, sudoración de la manos, mariposas, entre otras manifestaciones. Por esta razón, Ortega y Gasset describía este estado como un periodo de imbecilidad transitoria. Este periodo puede durar entre 18 y 30 meses.
Si la relación continúa, entramos al segundo piso de la pirámide y se considera que es un periodo de apego, cariño, en el cual interviene el cerebro medio y sustancias como la oxitocina se elevan, Este neurotransmisor está involucrado en el comportamiento social. La oxitocina es llamada la sustancia química del abrazo, ya que es el neurotransmisor de la empatía y el enlace.
En una tercera etapa se produce una gran atracción intelectual, la persona admira al ser amado, lo que lleva al amor perdurable, en el cual interviene la neo corteza. Estas parejas que llevan 30 o 40 años, probablemente hicieron un convenio de convivencia, son parejas que tienen vidas paralelas con un objetivo común a largo plazo. Esto depende de la inteligencia de cada miembro de la pareja.
¿Qué se necesita para llegar al amor perdurable? es la pregunta que surge. La respuesta puede contener algo de todo. No solo inteligencia, se necesita paciencia, condescendencia, tolerancia, generosidad, apego, cariño, amistad. El amor va de la emoción al sentimiento, de lo irracional a lo racional y se construye paso a paso