Respuestas
Respuesta: Las drogas se han constituido en un problema mundial, tanto por los daños a la
salud de la población que las consume, cuanto por los efectos colaterales
negativos en la propia Institucionalidad de los Estados.
En el plano internacional se han hecho esfuerzos importantes para atacar este
grave problema. En 1961 en New York, se realizó la Convención Única de las
Naciones Unidas sobre estupefacientes, en la que se crea la Junta Internacional
de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE), y se define una nomenclatura y marco
legal básico respecto de las sustancias sujetas a fiscalización, y su esfera de
aplicación, medidas contra el tráfico ilícito, así como las obligaciones de los
países miembros, entre otros aspectos.
Diez años después, en 1971, la Conferencia de las Naciones Unidas, suscribe el
Acta Final para la Adopción de un Protocolo sobre Sustancias Sicotrópicas, así
como de las listas anexas al Convenio, precisando en la necesidad de aplicación
provisional del Protocolo sobre Sustancias Psicotrópicas hasta su entrada en
vigor, así como la invitación a los organismos mundiales de salud, para que
concentren esfuerzos en el desarrollo de investigaciones sobre drogas para uso
médico menos peligrosas que sustituyan a las drogas anfetamínicas.
El convenio además estableció alcances al documento de 1961, respecto a la
fiscalización de las sustancias, disposiciones especiales relativas a la fiscalización
de los preparados, limitación del uso a los fines médicos y científicos, licencias,
recetas médicas, advertencias en paquetes y propaganda, registros, comercio
internacional y sus restricciones, informes y reportes, así como medidas para
asegurar la ejecución de las disposiciones del Convenio, entre otros aspectos.
En 1988 se celebró la Convención de las Naciones Unidas contra el Tráfico Ilícito
de Estupefacientes y Sustancias Psicotrópicas, en Viena, donde se expresó la
profunda preocupación “por la magnitud y la tendencia creciente de la producción,
la demanda y el tráfico ilícitos de estupefacientes y sustancias psicotrópicas, que
representan una grave amenaza para la salud y el bienestar de los seres
humanos y menoscaban las bases económicas, culturales y políticas de la
sociedad”. *
Más allá de la declaración, este evento aseguró la adopción de medidas
nacionales para el cumplimiento de las obligaciones contraídas en esta materia,
pero dejó muy claro que “las partes cumplirán sus obligaciones derivadas de la
presente Convención de manera que concuerde con los principios de la igualdada:
Explicación: