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Respuesta:
Desde que se produjo la Revolución de Mayo en 1810 y luego, con la independencia de las provincias Unidas en julio de 1816, se abrió el camino para la formación de una nueva unidad nacional en el Río de la Plata. La organización de ese territorio implicaba la creación de un gobierno central al que todas las nuevas unidades (llamadas provincias) obedecieran. Pero para comienzos de la década de 1850 este objetivo aún parecía lejos de cumplirse.
Uno de los elementos que dificultaba la organización nacional era la cuestión de la forma de gobierno que debía adoptarse. Por un lado, estaba la posición de los centralistas o unitarios, quienes estaban a favor de la creación de un gobierno fuerte, encargado de tomar la mayor parte de las decisiones. Por el otro lado, estaban los federales, quienes pretendían que las provincias conservaran parte de su autonomía, por ejemplo, para el nombramiento de sus autoridades. Este conflicto había llevado a una serie de guerras civiles, es decir, de enfrentamientos armados entre ambos grupos, sobre todo, en la década de 1820.
Otro de los puntos de disputa era la Aduana de Buenos Aires. El puerto de la ciudad era el más visitado por los barcos extranjeros que llegaban para vender sus productos. La Aduana de la ciudad cobraba todos los impuestos; por esta razón, las autoridades de la provincia querían conservar el privilegio de ser el único puerto autorizado para el comercio con el exterior. Así, se negaron a permitir la libre navegación de los ríos interiores, en especial, de los ríos Paraná y Uruguay. Una vez llegados a Buenos Aires, los productos se distribuían hacia el interior en carretas, por lo que eran más caros debido a los gastos de traslado. Por esta razón, las provincias del Litoral reclamaban la libre navegación de los ríos, ya que no querían depender de los comerciantes porteños. Además, sus autoridades querían que los ingresos de la Aduana porteña se distribuyeran entre las restantes provincias a lo que el gobierno de Buenos Aires se negaba
Explicación:
la postura de centralistas o unitarios, son quienes están a favor de la creación de un gobierno determinado, encargado de tomar la mayor parte de las decisiones. Por el otro lado, estaban los federales, quienes pretendían que las provincias conservaran parte de su autonomía, por ejemplo, para el nombramiento de sus autoridades. ( basado en lo que compartió
benjapatroncostas)