Respuestas
A principios del siglo XIX, el Reino Unido había perdido su posición incontestable como potencia industrial. Alemania constituía un claro competidor en el mercado europeo, gracias a su potente industria, a su posición geográfica central, y a su sistema flexible de créditos. Pero, por otro lado, los mercados financieros seguían centrados en Londres y París. Los alemanes tenían serias dificultades para invertir su capital fuera de sus fronteras, por lo que reorientaron sus capitales hacia la inversión interna. En vísperas de la guerra mundial, los movimientos internacionales de capitales generaron muchas polémicas.
En la época de la paz armada abundaron las rivalidades territoriales. Entre Francia y Alemania permanecía el contencioso sobre Alsacia y Lorena. Francia reivindica estos territorios, mientras los alemanes emprendieron una activa política de germanización de los mismos, provocando incidentes graves.
Polonia seguía dividida entre Austria, Alemania y Rusia. Mientras los austriacos ejercían una administración conciliadora en Galitzia, los alemanes fomentaban la instalación de colonos en su zona. Por fin, Rusia presionaba en su área para que los polacos se uniesen definitivamente al Imperio ruso. En respuesta, el nacionalismo polaco luchó por la resurrección de Polonia desde Galitzia, provocando aún más el recelo entre rusos y austriacos.