Respuestas
Explicación:
Cuentan que la gente que se dedicaba a las labores de pesca, por las noches iban a pescar cerca de Cabo Blanco, pero no volvían nunca más. Solo su barca era devuelta por las olas a la orilla, sin la menor señal de algún pescador. Desaparecían misteriosamente como por encanto.
¡Un barco luminoso!
Según lo cuentan, todas las noches aparecía un barquito luminoso a pasearse y navegar, hasta que luego desaparecía en la inmensidad de las aguas. La esposa de un pescador estaba cierta vez triste y desesperada por la tardanza de su esposo, cuando sintió un inmenso calor en todo el cuerpo y vio el reflejo tan grande de la luz de aquel barquito.
Entonces, una voz débil le dijo: “No habrá más aflicciones para este sitio, pero pido que mañana, que es día de San Juan, arrojen al mar a un niño sin bautizar, a las doce de la noche, o si no, los hombres que fueron a pescar desaparecerán”. La mujer palideció pero prometió hacer lo convenido por lo cual la barca desapareció rápidamente.
Una de las mujeres hizo el más grande de los sacrificios tomando a su hijita en brazos, quien estaba moribunda y desahuciada por los médicos, y con gran pena arrojó a la criatura al mar e inmediatamente, la barca estalló. Se dice que la embarcación era de un pirata condenado que quiso salvarse haciendo desaparecer a muchos hombres. Sin embargo, solo un niño sin bautizar podía salvarlo; y es por eso que desapareció para siempre. Dicen que solo por Semana Santa sale a las doce para asolar esos lugares.