Respuestas
Según reportes, María se sintió profundamente encantada con los paisajes del Perú. En 1936 regresaría a su ciudad en Alemania sólo para terminar volviendo al Perú, ya que su ciudad estaba acabada por la guerra. Desde ése entoces, María Reiche no regresaría a su país natal.
En el año 1941 María Reicher conoció a Paul Kosok, el profesor estadounidense quién le mostró las Líneas de Nasca. A partir de ese momento María descubrió su vocación, se retiró y se fue al desierto para convertirse en la defensora y propulsora de los jeroglíficos y de las líneas nasca.
Prácticamente defendió, cuidó y protegió el lugar bajo las condiciones que supone vivir en el desierto y hasta el final de sus días. Por fortuna pudo ver cuando las líneas de nasca fueron reconocidas como Patrimonio Cultural de la Nación de Perú en el año 1993 y al año siguiente las líneas fueron ueron declaradas Patrimonio Mundial de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura por la UNESCO.
María Leiche murió a los 85 años, el 8 de junio de 1998 en la ciudad de Lima, Perú.
Respuesta:
ok
Explicación:
María Victoria Reiche Neumann (Dresde, Imperio alemán; 15 de mayo de 1903-Lima; 8 de junio de 1998) fue una arqueóloga y matemática alemana nacionalizada peruana, la mayor estudiosa de las líneas de Nazca, a las que dedicó gran parte de su vida
María Victoria Reiche Neumann o simplemente María Reiche nació en Dresde, Alemania. Fue célebre por sus investigaciones y conservación de las líneas de Nazca en Perú. Sus padres eran Felix Reiche Grosse y Ana Elizabeth Neumann. Durante su infancia vivió junto con sus hermanos menores, Renate y Franz, en la calle Zittauer Strasse en Dresde. Llegó al Perú en 1932 para educar a los hijos del cónsul alemán en la ciudad de Cusco. Lo primero que la impresionó fue el esplendor y la belleza de los paisajes andinos.
En 1936 retornó a su país y un año después, a fines de 1937, volvió a Perú y nunca más regresaría a su ciudad natal de Dresde, que quedó destruida durante la Segunda guerra mundial. Entonces decidió establecer su hogar en Lima, donde ofreció sus servicios como profesora de gimnasia, alemán e inglés.
En el Tearoom, una cafetería de encuentro para extranjeros e intelectuales, conoció María Reiche a Julio C. Tello, para quien ella traduciría su trabajo y a Paul Kosok, quien la llevaría a Nazca por primera vez en 1941. El Tearoom le pertenecía a la inglesa Amy Meredith, quien fue la primera financiera de la obra de Maria y con quien ella vivió por 21 años. Amy fallece en enero de 1960 de cáncer de ovario y el dinero que Maria hereda de Amy ayudaría a seguir sus investigaciones. Pero es una época muy dura para María y no regresaría por un tiempo a Nazca. Decidió ir a la sierra y trabajar los siguientes años como educadora en zonas de extrema pobreza.
María Reiche inició una vida dedicada al estudio e investigación de las líneas de Nazca a partir de 1946, estimulada por los estudios del arqueólogo estadounidense Paul Kosok. La matemática, geografía y física fueron mucho de su interés, fue graduada en la Universidad Técnica de Dresde y en Perú descubrió una vocación en la que concentraría todas sus energías.
En 1992 el gobierno le concede el título de ciudadana honoraria de Perú, oficializado con su nacionalización definitiva al año siguiente. También recibió las Palmas Magisteriales en el grado de Amauta y la Orden El Sol del Perú en el grado de Gran Cruz.
En diciembre de 1994, gracias a sus esfuerzos y gestiones, la Unesco acordó otorgar a las líneas de Nazca la categoría de Patrimonio Cultural de la Humanidad. En los últimos años, debido a su delicado estado de salud, María Reiche ocupó una habitación en el hotel de turistas de Nazca, siendo asistida por su hermana Renata, quien falleció en 1995.
Maria falleció en Lima el 8 de junio de 1998. Un mes antes, la Unesco la había condecorado con la medalla Machu Picchu. El gobierno peruano le otorgó póstumamente la Orden al mérito por servicios distinguidos en el grado de Gran Cruz.
Tengo definida mi vida hasta el último minuto de mi existencia. El tiempo será poco para estudiar la maravilla que encierran las pampas de Nasca, allí moriré".
"¡Todo era por Nasca! Si cien vidas tuviera, las daría por Nasca. Y si mil sacrificios tuviera que hacer, los haría, si por Nasca fuera".
"Yo quiero, con mi obra, ser un instrumento para eliminar las injusticias y para que los peruanos --que son gente de cualidades culturales, morales y físicas especiales-- recuperen su propia estimación. Yo les digo: yo soy chola, porque me siento a veces más unida con los cholitos, y sobre todo ahora que tengo la nacionalidad peruana".
María Reiche