Respuestas
Respuesta:
2 La obediencia a las leyes físicas de Dios; constituye el mejor método para prevenir, toda enfermedad corporal. Para ello se debe evitar los excesos físicos y de alimentación.
3. Porque una gran mayoría mueren; a causa de su propia gula e ignorancia, con respecto a los hábitos correctos dietéticos.
4. También debemos prevenir, el endurecimiento de nuestras arterias, la diabetes y obesidad, con una dieta alimenticia, adecuada.
5. Por otra parte, se debe obedecer las divinas leyes higiénicas. La práctica de la higiene mental, es superior a la higiene física; mas no por ello, debe despreciarse la importancia de la última.
6. Sin embargo, no vivamos conforme a reglas de higiene tan rígidas, para que el menor desviación de ella, no nos perturbe.
7. Prevengamos el desgaste físico; mediante el dominio de métodos apropiados, para conservar la energía física. Y para proveer al cuerpo, de una inagotable cantidad de energía vital, a través de la práctica de los ejercicios.
8. Pero también, evitemos someter al corazón, a un trabajo exclusivo; porque el temor, la angustia y la ira, fatigan este órgano.
9. Mediante la serenidad mental; debemos brindadle al corazón, el reposo necesario.
10. Si estimamos que la cantidad de sangre expulsada en cada contracción; de los ventrículos del corazón, suma alrededor de ciento quince mililitros. Este órgano movería un peso equivalente, a ocho kilogramos de sangre en un minuto.
11. Por lo que en el lapso de un día, el corazón impulsaría aproximadamente doce toneladas de sangre; y en un año, este valor ascendería a cuatro mil toneladas. Tales cifras demuestran, el enorme trabajo desarrollado por el corazón.
12. Generalmente se considera que el corazón reposa, entre cada contracción (Período diastólico o de expansión); con lo cual recibiría cada veinticuatro horas, un descanso total de nueve horas.
13. Este período diastólico, no corresponde a un verdadero reposo; sino que constituye simplemente, una etapa de preparación para el movimiento sistólico siguiente.
14. Las vibraciones provocadas por la contracción de los ventrículos reverberan, a través de los tejidos cardíacos durante su relajación. Por lo tanto; el corazón, nunca se encuentra realmente en reposo.
15. Estando el músculo cardíaco sometido día y noche a un continuo desgaste de energía; naturalmente tiende, a cansarse. Por consiguiente, sería de considerable valor para mantener la salud; el depararle al corazón, un reposo adecuado.
16. El control consciente del sueño, el aprender a dormir y a despertar a voluntad; constituyen parte del entrenamiento. Una de cuyas fases capacita a la persona, a regular los latidos cardíacos.
Explicación: UWU UWU :V:v:v.VV.v::v.V..