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Respuesta:
La Carta de Santiago (=Stg) puede considerarse como una colección de enseñanzas sobre diversos aspectos prácticos de la vida cristiana.
Es el escrito del Nuevo Testamento que tiene mayor semejanza con las enseñanzas de los sabios del Antiguo Testamento en la llamada literatura sapiencial. En efecto, el tema de la sabiduría aparece en varios lugares de la carta (Stg 1.5; 3.13-18), una sabiduría que, como se entiende en la Biblia, no se refiere tanto a los conocimientos científicos sobre el mundo, ni es principalmente una teoría sobre Dios o sobre el hombre, sino que consiste en ordenar la vida de acuerdo con la voluntad de Dios; es decir, en vivir rectamente.
Explicación:
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El Tema Central de Santiago es: Dios es Soberano y prueba a quien Quiere cuando él quiere.
Explicación:
Santiago igual que el libro de Job ataca la idea errada de pensar que aquí abajo se puede vivir una relación de justicia donde nuestras obras nos brinden y nos aseguren la bendición de Dios, es decir que nuestra condición, económica y de salud son muestras de una buena relación con Dios, porque Dios "tiene que bendecir" a los Justos ese principio legalista es atacado en todo el libro, Por eso Santiago exalta el derecho de Dios de someter a prueba a quien él quiera y pide que el que pasa por diversas pruebas se goce porque Dios así lo ha querido para poder producir paciencia en el creyente, Santiago 1: 2 Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, 3sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. 4Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna.
Santiago condena la corriente el mundo que se habia colado en la iglesia, de que se puede juzgar la vida espiritual de una persona fijandose en los vienes materiales, y tomando como una prueba de que Dios estaba a favor de las personas el hecho que las personas fueran prosperas,
Santiago 1: 9 El hermano que es de humilde condición, gloríese en su exaltación; 10pero el que es rico, en su humillación; porque él pasará como la flor de la hierba. 11Porque cuando sale el sol con calor abrasador, la hierba se seca, su flor se cae, y perece su hermosa apariencia; así también se marchitará el rico en todas sus empresas.
En contraparte Santiago ofrece que para evaluar si una persona está realmente caminando con Dios se evalúe según los frutos, si es una persona que no solamente habla de la palabra, sino que la ponga en practica,
Santiago 1:19 Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse; 20porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios. 21Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas.
22Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos. 23Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. 24Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. 25Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace.
Si tomas en cuenta esta idea central, entenderás la razón de cada parte de las exhortaciones de Santiago, de no juzgar a la ligera por las apariencias, de no hacer acepción de personas, y el porque él parece condenar a los ricos (condena la soberbia detrás de ellos y sus herejías) Santiago acusa a los cristianos de condenar injustamente por las apariencias, siempre presumiendo que una persona adinerada, estaba bien con Dios solo por el hecho de "Mostrar la bendición de Dios" a través de sus bienes, Esa idea es del mundo, es sabiduría humana (razonamiento humano) Dios es soberano y el puede poner a prueba a quien él quiera y eso no es señal de que un cristiano no esté bien con él, Santiago 4: 11Hermanos, no murmuréis los unos de los otros. El que murmura del hermano y juzga a su hermano, murmura de la ley y juzga a la ley; pero si tú juzgas a la ley, no eres hacedor de la ley, sino juez. 12Uno solo es el dador de la ley, que puede salvar y perder; pero tú, ¿quién eres para que juzgues a otro?
Santiago 5:9 Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para que no seáis condenados; he aquí, el juez está delante de la puerta. 10Hermanos míos, tomad como ejemplo de aflicción y de paciencia a los profetas que hablaron en nombre del Señor. 11He aquí, tenemos por bienaventurados a los que sufren. Habéis oído de la paciencia de Job, y habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y compasivo.
Santiago aboga por aquellos que estan pasando por diversas pruebas como hombres dignos de ejemplo y no como hombres que deban ser criticados y condenados por estar pasando por esas pruebas, por eso combate la arrogancia, la jactancia y manda a vivir una vida humilde sometidos bajo la poderosa manos de Dios para que él sea él que exalte al Cristiano cuando fuere su voluntad.