Respuestas
Respuesta:
“En una época invadida por nuevos inventos, avances técnicos y aventuras espaciales nunca soñadas en la generación anterior, las viejas ideas, los viejos modos de hacer las cosas, y los valores que antes teníamos como inmutables, han cambiado totalmente o están cambiando tan rápidamente que es difícil que el joven de hoy sepa qué es en lo que ha de creer o vivir, y no está mucho más seguro de saber qué es aquello por lo que merece la pena dar la vida”.
Explicación:
La actitud contestataria y rebelde de la juventud actual obedece no tanto al desacuerdo con las ideas y valores de los adultos, cuanto a que estos valores en muchas ocasiones no existen. Los jóvenes echan de menos unos criterios, unas pautas y modelos de conducta a seguir; unos valores encarnados en la vida de personas concretas que les muevan a una actitud de compromiso en su vida.
Como consecuencia de esta situación “el adolescente de hoy está en mayor conflicto con la sociedad y con la generación anterior. Manifiesta menos conformidad a las exigencias de la autoridad y exige más independencia. En muchos casos está en rebelión abierta con las exigencias, costumbres y “vacas gordas” de la sociedad. Comparado con los adolescentes de la generación anterior se aleja del santuario del hogar hacia la incierta seguridad del grupo de amigos y las redes sociales.
Se trata de una rebelión que nace de una necesidad de seguridad no satisfecha, de un ansia de ser mejor no orientada, de una búsqueda del ideal no apoyada con el ejemplo y la autoridad de los mayores. No es extraño, entonces, que los jóvenes de hoy sean más escépticos y críticos en relación con el mundo de los adultos, que se sientan más angustiados y desorientados, que estén más preocupados por un mundo más justo y fraternal, que tengan miedo al futuro.