que inspiran las siguientes pinturas:
1. la creación de adán - Miguel Ángel
2. cristo en el limbo - Fra angélico
3.¨la gioconda¨ ( la mona lisa ) - leonardo da vinci
Respuestas
Respuesta:
1. La creación de Adan: El tema central de la escena se inspira en el episodio de la creación del primer hombre descrito en el libro de Génesis del Antiguo Testamento, en la Biblia. Allí se relata el momento en que Yaveh llega a la Tierra para crear un ser a su imagen y semejanza.
2.Cristo en el limbo: Este es el fresco en la pared de la célula 31 del convento di san marco en florencia, En por el contrario al más frescos en el células de los frailes asícomo principiantes , los de el corredor de los hermanos legos son relatos ilustrativos que de cerca siga el Evangelio de mateo.
3. La Gioconda o monalisa:
Desde el punto de vista de la composición, la Mona Lisa es un retrato de medio cuerpo, o de tres cuartos, sobre un paisaje que se divide en dos atmósferas, una más fría (la superior) y otra más cálida con colores terrosos (la inferior).
La postura de la mujer deriva de la “pirámide” usada para representar a las madonnas sentadas, es decir, que se trata de una geometrización triangular.
Sus manos cruzadas forman la base de la forma piramidal. La luz aplicada al pecho y al cuello es la misma aplicada en las manos.
El centro del cuadro es el pecho de la mujer y está alineado con el ojo izquierdo y los dedos de la mano derecha. Esto acentúa la presencia del personaje en la composición.
Su brazo izquierdo está cómodamente apoyado en el brazo del sillón y está cruzado por el brazo derecho. La posición de los brazos junto con el del sillón transmiten una distancia entre ella y el espectador.
La cabeza está cubierta por un velo que simboliza la castidad, frecuente en los retratos de esposa. También se atribuye el uso de este tipo de velo a las mujeres embarazadas o en período post-parto. No presenta joyas ni signos particulares de ostentación económica o de poder.
La postura de la Mona Lisa indica serenidad y, junto con la mirada de soslayo, pero directa hacia el espectador, muestra el dominio de los sentimientos, cosa que normalmente no se atribuía a una mujer en aquel entonces.
El rostro no tiene cejas. La expresión de la mujer en el cuadro es enigmática o ambigua. Esto se debe a que la mirada, el cuerpo y las manos están dirigidas a ángulos sutilmente diferentes, sumado a la ilusión que crea la técnica del sfumato.