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-segun internet:. La Iglesia en la Edad Media fue una institución muy poderosa ya que fue una época profundamente religiosa. Por eso, la Iglesia católica/cristiana tuvo mucha influencia sobre la sociedad y, aunque existían otros credos, en el siglo XI Europa era en gran parte cristiana.
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El Cristianismo Durante La Edad Media abarca los hechos relacionados con el cristianismo desde la caída del Imperio romano de Occidente
Comienza con el derrocamiento del último emperador romano de occidente (Rómulo Augusto) por Odoacro, líder de los hérulos, en el año 476 y finaliza con la coronación de Carlomagno en el año 800. Ya que el inicio de la Alta Edad Media fue un proceso gradual en el cual la fuente de riqueza y poder se fue transfiriendo desde las ciudades al campo, mientras decaía la autoridad del poder central del emperador de Roma.
En los comienzos del cristianismo no había diferencia entre los diferentes obispos, aunque tras el cese de las persecuciones romanas
En el rastreo del primado papal, Dámaso I (366-384), se presentó como un nexo espiritual entre los cristianos del Imperio Romano de Occidente y de Oriente, mientras se mostraba intrasigente con las doctrinas contrarias a las establecidas en los concilios. Al mismo tiempo, la figura del emperador se consolida en el dominado, por la que adopta una forma mística, legitimada y enviada por Dios, que busca el centralismo del poder mediante el apoyo de la Iglesia.
Al mismo tiempo que el poder de la Iglesia cristiana iba creciendo en Europa, el de los emperadores disminuía. En medio de la crisis por las guerras constantes, el emperador Justiniano I (527-565) trató de reafirmar el dominio imperial en Italia desde el este, en lo que se conoce como guerra gótica (535-554)
En 568 los lombardos invadieron la península estableciendo el Reino lombardo. Cuando entraron en Italia, algunos lombardos conservaron su forma nativa de paganismo, mientras que otros eran cristianos arrianos, de ahí que no tuvieran buenas relaciones con la Iglesia católica, a la que persiguieron con celo.
Tras la caída del Imperio Romano de Occidente, los misioneros cristianos comenzaron a predicar entre pueblos de origen celta y germánico.