Respuestas
Respuesta: 1. El Islam convirtió la Primavera Árabe en una guerra."Al principio, el levantamiento árabe hizo pensar en un despertar. Un despertar muy bello.
2. La Historia no tiene cabida en el Islam. "Se diría que a los árabes de hoy les falta el espíritu del cuestionamiento. En cuanto se refiere a la historia, los árabes no llegan a pensar objetivamente el primer estado llamado arabo-musulmán que fue fundado sobre el poder y la pertenencia a la tribu.
3. El Corán es un texto extremadamente violento. "Se trata de un texto extremadamente violento. He encontrado 80 versículos sobre la gehena, 66 que evocan el paraíso y 72 que hablan del paraíso como lugar de disfrute infinito.
4. El Islam desacredita, maldice y aplasta a la mujer. "La mujer siempre ha sido desacreditada o maldecida, cuando no literalmente aplastada. La mujer no figuraba entre los dirigentes. Siempre ha ocupado una segunda categoría. No formaba parte de lo que, en el fondo, constituía una sociedad.
5. El Islam envenena la relación con Occidente. "En Europa la sociedad ha envejecido. Está agotada, es decir, arruinada, sobre todo por los problemas económicos. Todo el mundo busca trabajo. Las personas tienen miedo del porvenir.
Explicación:
Respuesta:
1. El Islam convirtió la Primavera Árabe en una guerra
2. La Historia no tiene cabida en el Islam
3. El Corán es un texto extremadamente violento
4. El Islam desacredita, maldice y aplasta a la mujer
Explicación:
1Al principio, el levantamiento árabe hizo pensar en un despertar. Un despertar muy bello. Pero los acontecimientos que siguieron a la llamada primavera árabe han demostrado que no se trataba de una revolución, sino de una guerra, y que esta, en vez de sublevarse contra la tiranía, se ha convertido en otra tiranía. Por supuesto hubo oposiciones que no recurrieron a la violencia. Pero fueron aplastadas por el peso de los acontecimientos que se desarrollaron tras el inicio del levantamiento. Por otra parte esta revolución ha demostrado que era confesional, tribal y no cívica, musulmana y no árabe. (.. .) ¿Podemos hablar de una revolución árabe si la mujer sigue estando prisionera de la sharía? El recurso a la religión ha transformado esta primavera en un infierno".
2"Se diría que a los árabes de hoy les falta el espíritu del cuestionamiento. En cuanto se refiere a la historia, los árabes no llegan a pensar objetivamente el primer estado llamado arabo-musulmán que fue fundado sobre el poder y la pertenencia a la tribu. Quien dice tribu dice ausencia de pluralidad. (...) Lamentablemente, uno se da cuenta de que el pensamiento árabe, incluso el calificado como moderno, sigue siendo dogmático y prisionero del espíritu de la tribu. No hay nada que cambiar, nada que cuestionar. Todo debe permanecer fijo, inmutable. Lo que hemos denominado 'a sr an-nahda' (el renacimiento), se revela un falso renacimiento. Por tanto, no se puede reinterpretar la historia, ni analizarla, ni avanzar, si no se logra romper con el espíritu religioso y la mentalidad tribal".
3"Se trata de un texto extremadamente violento. He encontrado 80 versículos sobre la gehena, 66 que evocan el paraíso y 72 que hablan del paraíso como lugar de disfrute infinito. El 'kufr' (el rechazo a Alá) y sus derivados figuran en 518 versículos, el suplicio y sus derivados fueron objeto de más de 370. De 3.000 versículos, 518 tratan del castigo. El infierno se menciona 80 veces. (. ..) Sin embargo no encontramos ni un sólo versículo que incite a la reflexión u otro que aluda a los beneficios o ventajas de la razón o del espíritu, entendido como espíritu creativo. Cuando el Corán dice 'y atafak -karum' (reflexionar, razonar), es en el sentido de acordarse de los preceptos ya indicados en el Corán para aplicarlos".
4"La mujer siempre ha sido desacreditada o maldecida, cuando no literalmente aplastada. La mujer no figuraba entre los dirigentes. Siempre ha ocupado una segunda categoría. No formaba parte de lo que, en el fondo, constituía una sociedad. Se la consideraba como un objeto decorativo. (. ..) El islam ha matado a la mujer. La mujer ya no existe, solamente un sexo o una fantasía que se llamar 'la mujer'. Y ha hecho de ella un instrumento para el deseo o el placer del hombre. Ha utilizado la naturaleza para establecer y asentar desde el principio su dominio y su poder. (. ..) Lo peor es que los revolucionarios árabes y musulmanes dejan de ser revolucionarios si los confrontamos con la cuestión de la mujer. Los revolucionarios acaban siendo igual de fundamentalistas".