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En algunos países es común que ocupen cargos de gobierno, incluso el de presidente, profesionistas de otras áreas, como abogados, ingenieros, etcétera, que no han tenido una preparación académica que los capacite específicamente en las funciones de gobierno. Incluso se dan casos de personas que ocupan cargos de gobierno sin haber cursado ninguna carrera universitaria. La preparación de tales personas ha sido solamente práctica. Es como si tuviéramos enfermeros experimentados ocupando los puestos propios de médicos debidamente graduados.
Si sería absurdo que ocuparan puestos de médicos personas elegidas popularmente, aunque no tuvieran la correspondiente carrera universitaria, con mayor razón lo es en el caso de que dichos puestos sean los de gobernantes. Es obvio que los países que todavía no tengan una carrera universitaria, con diversos grados y postgrados, destinada a preparar específicamente en las funciones de gobierno, deberían crearla tan pronto como fuera posible. En lo que sigue presupondré que dicha carrera universitaria existe y que funciona debidamente. De no ser así, siempre será posible que dichos estudios se realicen en el extranjero.
Lo normal debe ser que en un país se conozcan los diferentes cargos de gobierno que están en funciones, como el de presidente o primer ministro, los de gobernadores de los estados, presidentes municipales, alcaldes, etcétera. Y también deberían conocerse los requisitos para desempeñar cada uno de dichos cargos, tanto los requisitos académicos como los de experiencia previa. Así, por ejemplo, para ser presidente de una república podrían requerirse el doctorado en funciones de gobierno y al menos diez años de experiencia como gobernador de algún estado o como miembro del gabinete presidencial. En fin, en cada país deberían definirse dichos requisitos.
Finalmente, deberían conocerse todas las personas que reúnen los requisitos de idoneidad para cada uno de los cargos de gobierno de la nación. Toda esa información debería estar en Internet a la vista de todos los ciudadanos, gratuitamente. Y así, por ejemplo, si se va a elegir al presidente de la republica o primer ministro, al buscar en Internet dicho cargo, deberían aparecer los perfiles pertinentes de todas las personas idóneas, que por lo mismo pueden ser candidatas para el cargo.
Todas las personas adultas, así elegidas, eligen a un profesionista de toda su confianza, que puede ser la persona misma que elige, si es profesionista.
Todos los profesionistas, así elegidos, eligen a una persona de toda su confianza que sea idónea para el cargo, que puede ser el profesionista mismo que elige, si es idóneo para el cargo.
Todas las personas idóneas para el cargo, así elegidas, eligen a otra persona idónea para el cargo, de toda su confianza, que puede ser la persona misma que elige.
Lo dicho en el número 4 se repite hasta llegar a un grupo de personas elegidas que sea lo suficientemente pequeño (12 ó menos) como para formar un temporal consejo de gobierno.
En seguida ese consejo de gobierno deliberará a fin de llegar a un acuerdo, y así elegir de manera inteligente al gobernante requerido, en vez de que sea elegido por una ciega mayoría de votos. Sobre la actividad de ese consejo de gobierno hablaré en artículos futuros