Respuestas
Respuesta:
¡Ya Basta!
(Arjona Delia)
El dolor desgarra sus entrañas,
el sufrimiento es su compañero,
se olvidó de la palabra amor,
ahora su hogar es un infierno.
El hombre destruyó lo sagrado,
ahoga sus palabras y silencios,
¡Rompe y aniquila hasta sus huesos!
¡Ya basta! ¡Detente! ¡No eres dueño!
Tú ...mujer... limpia ya tus lágrimas,
no más llantos y no más tristezas,
¡Exige el respeto que mereces!
¡Y levanta firme tu cabeza!
Estrecha mi mano, ten coraje,
encontremos un nuevo destino,
donde felicidad sea anclaje,
¡Y libertad sea tu camino!
No podrán callar las voces
(Arjona Delia)
Ante crímenes atroces,
¡no podrán callar las voces!
de la gente al reclamar.
¡No queremos más violencia!
de los hombres sin conciencia,
“Ni una menos” proclamar.
Que no existan más esclavas,
que no le arranquen sus alas,
¡que las dejan sin volar!
Y que no asfixien sus sueños,
porque ellos no son los dueños
de su cuerpo y su pensar.
¡No podrán callar las voces!
que haya leyes más veloces,
¡y a la mujer protección!
A los que sean violentos,
y no tengan sentimientos,
¡que terminen en prisión!
Que se escuchen fuertes voces,
ninguna madre solloce,
¡porque su hija ya no está!
Que las leyes los condenen,
“Ni una menos” que resuene,
¡así nadie callará!
Que se tomen las medidas,
¡está en juego nuestras vidas!
el derecho a la igualdad.
Que seamos respetadas,
nuestras voces escuchadas,
¡y vivir en libertad!
Respétame!
(Arjona Delia)
¡Respétame!
No pretendas lastimarme,
tengo derecho a negarme,
no me debes silenciar.
Mi cuerpo que es sagrado
debe ser respetado,
¡no me puedes obligar!
¡Respétame!
¡No me humilles y sometas!
Me arrinconas y me aprietas
no me permites volar.
No me daré por vencida,
encontraré la salida,
¡y no me podrás callar!
¡Respétame!
No destruyas, desalientes,
mis ideas diferentes,
no me quieras confundir.
No aprisiones a mi mente,
no me aísles de la gente,
¡no me puedes oprimir!
¡Respétame!
No me pongas condiciones,
respeta mis decisiones,
tengo derecho a elegir.
No hieras mis sentimientos,
ni condenes pensamientos,
¡quiero en felicidad vivir!
¡Respétame!
No agacharé la cabeza,
no ganará la tristeza,
yo no me voy a rendir.
¡Y lucharé, lo prometo,
por mi derecho al respeto
para en libertad vivir!
¡Respétame!
Explicación:
Antes de radactar poesía contra la violencia sobre la mujer, es necesario que conozcas la siguiente información:
La violencia contra la mujer
La violencia contra la mujer es un problema que afecta a toda la sociedad. Es una forma de discriminación que se basa en el género y que tiene consecuencias graves tanto para las mujeres como para sus familias y la sociedad en general.
La violencia contra la mujer es una realidad que se vive a diario en todo el mundo. Según datos de la ONU, el 30% de las mujeres en el mundo han sufrido algún tipo de violencia física o sexual a manos de su pareja o ex-pareja. Y este número es aún mayor si tenemos en cuenta otros tipos de violencia, como la psicológica o la económica.
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