Necesito hacer una redaccion. Hay alguien que tenga alguna historia que tenga como minimo dos paginas. Da igual la temática. DOY TODOS LOS PUNTOS QUE TENGO!
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A mediados del siglo XIX, limpiando en un trastero de la Universidad de Valladolid, un bedel se encontró con una silla abandonada en una esquina, como un trasto más. Cansado, decidió sentarse un rato. Tres días después lo encontraron en el trastero, en la misma esquina, en la misma silla, muerto. Cuando un segundo bedel murió en las mismas circunstancias, las alarmas se dispararon y la leyenda se fraguó.
La historia se remonta a principios del siglo XVI, cuando la Inquisición detuvo al médico Andrés de Proaza por asesinato, tortura y pacto con el diablo. Había abierto una cátedra de Anatomía pero los rumores decían que sus conocimientos provenían del Maligno. La desaparición de un niño cerca de su casa alertó a las autoridades, que le sacaron la confesión de asesinato, pero no de un acuerdo demoníaco.
Sí admitió que poseía un sillón, regalo un nigromante de Navarra, que le permitía entrar en trance y del que obtenía todo el conocimiento que necesitaba para sus diagnósticos. Aseguraba que sólo un médico titulado podía hacer uso de él, y que cualquier otra persona moriría a los tres días...
En la actualidad, el sillón se encuentra en el Museo Provincial de Valladolid
Segunda Historia: Al arrancar el papel de una de las paredes de su casa, en lacalle del doctor Barraquer, de donde procedían los fenómenos más virulentos, descubrieron que debajo se dibujaba un nombre: Charo.
Algunos vecinos recordaron la época en la que el apartamento estuvo ocupado por una mujer que decía ser vidente. Tenía una bola de cristal y se decía que realizaba rituales extraños, además de practicar la ouija. El nombre de la vidente, de la que no se supo nada después de que abandonase la casa, era Charo.
Clara Tahoces, colaboradora de Cuarto Milenio, estuvo investigando el caso y descubrió que la pareja decidió mudarse. Pero los vecinos siguieron escuchando ruidos que provenían de la vivienda vacía.
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Explicación:
1
Allá arriba donde el planeta se codea con el cielo y la gente se abre paso entre auroras boleares
para ir a sus quehaceres cotidianos, las Islas Feroe se equilibran sobre las gélidas aguas del Océano
Atlántico Norte. Comadre de países tan disímiles como Islandia, Groenlandia y Escocia, este inverosímil rompecabezas de diez islas verdes y frescas cual esmeraldas suele ser el lugar de vacaciones de Freya, la diosa nórdica de la fertilidad, el amor y la alegría de vivir.
Ahora, en otro país más al sur, el Reino de Dinamarca, célebre en el mundo entero por sus formidables tormentas de hielo, sus patitos feos, sus melancólicas sirenas y sus panes y pasteles y cervezas, se produjo hace algunos años atrás una violenta discusión entre panaderos, pasteleros y cervezeros en torno a la imprescindible y milagrosa levadura.
Los panaderos afirmaban que este producto natural que da consistencia y cuerpo al pan se llamaba dura leva (del latín: duro y levantar); mientras que los pasteleros, seres más intrincados y metafísicos, insistían en las palabras leva y dura (del latín: levitar y durar). Y los cervezeros estaban siempre tan borrachos que que no estuvieron en condiciones de presentar una teoría coherente.
2
Filósofos, filólogos y lingüistas fueron consultados hasta el hastío por la prensa y la televisión. El debate se expandió por la internet a todos los reinos escandinavos con tanta intensidad y fuerza que satélites y estaciones espaciales cayeron desde el cielo estrellándose contra el planeta.
La producción de pan y bizcochos, cervezas y levadura se estancó durante muchos años. Los súbditos nórdicos salieron a las calles a apedrear sus panaderías y pastelerías y cervezerías; los estudiantes y los sindicatos hicieron monstruosas manifestaciones de protesta destrozando todo a sus pasos y los políticos y la realeza se fueron a vivir a Ibiza.
Y ya no hubo mas levadura o duraleva en los otrora apacibles reinos escandinavos.
Las noticias llegaron a las diez Islas fereoenses y a los oídos de Freya. Y la formidable y bella diosa dorada interrumpió sus merecidas vacaciones, viajó inmediatamente al pasado, AD 1491, para pedirle a Cristóbal Colón una carabela prestada. Navegó nuevamente desde El Puerto de Palos en España de regreso a las Feroe. Cargó el navío con toneladas de cubitos de levadura y emprendió su ya legendario viaje desde El Puerto de Thor a través del Atlántico Norte hasta el neblinoso Puerto de Los Comerciantes en la ciudad de Copenhague, capital del reino danés.
Sin tripulación ni escolta, Freya jamás se sintió sola ni amedrentada. Sirenas y tritones la guiaron y le cantaron, y gigantezcos moluscos cefalópodos dibranquiales y octópodos de cien metros de longitud se acercaron cuidadosamnte a la nave para acariciarla y besarla. La travesía duró cuarenta días y cuarenta noches y en la madrugada del día número cuarenta y uno, una paloma trayendo una ramita de olivo se posó en el mástil del navío. Había llegado pot fín al Puerto de Los Comerciantes.