Respuestas
Respuesta
La carga debe ser equilibrada tratando de colocar los tubos de muestra repartidos de la forma más simétrica posible. Las diferencias de peso pueden desequilibrar el rotor cuando gira a gran velocidad ocasionando daños en la centrífuga y posible rotura de los tubos de muestra.
Los tubos deben ser de una calidad adecuada y suficiente para soportar la fuerza centrífuga a la que serán sometidos. No usar tubos de la calidad adecuada puede provocar su rotura y la pérdida de la muestra. Los ajustes de velocidad incorrectos también pueden causar roturas de los tubos. Para muestras biológicas o sustancias peligrosas es conveniente usar tubos con tapa.
La fatiga del metal puede afectar al rotor debido al estrés que suponen las elevadas fuerzas G a las que está sometido. No debe sobrepasarse su tiempo de vida útil para evitar accidentes.
La corrosión puede afectar tanto al rotor como al resto de componentes de las centrífugas de laboratorio, debilitando los materiales y reduciendo su capacidad para soportar las tensiones de la fuerza centrífuga. Deben comprobarse periódicamente para asegurar su perfecto estado de conservación.
La tapa debe permanecer cerrada durante el funcionamiento de la centrífuga. Nunca abra la tapa ni la mueva de lugar con el rotor en marcha. Las centrífugas más modernas disponen de bloqueo automático cuando el rotor está en marcha.