En que instituciones catolicas apoyan y orientan a las familias catolicas para consolidar su unidad en la cultura y explica en que consiste
Respuestas
Respuesta:
Las escuelas católicas se caracterizan principalmente como una comunidad educativa que busca formar a la persona en la unidad integral de su ser, utilizando las herramientas de enseñanza y aprendizaje donde "criterios de juicio, valores determinantes, puntos de interés, líneas de pensamiento, fuentes de inspiración y modelos de vida" son formados. Sobre todo, están involucrados en la dinámica de las relaciones interpersonales que forman y vivifican la comunidad escolar.
Por otro lado, por su identidad y sus raíces eclesiales, esta comunidad debe aspirar a convertirse en una comunidad cristiana, es decir, una comunidad de fe, capaz de crear relaciones de comunión cada vez más profundas, que a su vez son educativas. Es precisamente la presencia y la vida de una comunidad educativa, en la que todos los miembros participan en una comunión fraterna, alimentada por una relación viva con Cristo y con la Iglesia, que hace de la escuela católica el entorno para una experiencia auténtica mente eclesial.
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hola
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Las escuelas católicas se caracterizan principalmente como una comunidad educativa que busca formar a la persona en la unidad integral de su ser, utilizando las herramientas de enseñanza y aprendizaje donde "criterios de juicio, valores determinantes, puntos de interés, líneas de pensamiento, fuentes de inspiración y modelos de vida" son formados. Sobre todo, están involucrados en la dinámica de las relaciones interpersonales que forman y vivifican la comunidad escolar.
Por otro lado, por su identidad y sus raíces eclesiales, esta comunidad debe aspirar a convertirse en una comunidad cristiana, es decir, una comunidad de fe, capaz de crear relaciones de comunión cada vez más profundas, que a su vez son educativas. Es precisamente la presencia y la vida de una comunidad educativa, en la que todos los miembros participan en una comunión fraterna, alimentada por una relación viva con Cristo y con la Iglesia, que hace de la escuela católica el entorno para una experiencia auténtica mente eclesial.