Respuestas
Respuesta:
1. Analiza el estado de ánimo del personaje
Esto condicionará el diálogo, por lo que es fundamental tenerlo presente. Recuerda que se trata de las emociones de tu personaje, no de las tuyas, y que deberás ajustarlas a su forma de ser.
2. Busca formas de hablar que transmitan lo que el personaje siente
Se trata de plasmar sobre el papel elementos y emociones que en la vida real no se formulan en palabras, preferiblemente sin recurrir a explicaciones e incisos del tipo “dijo muy enfadado” o “exclamó muy contento”. Puede ser, por ejemplo, el habla entrecortada, el repetirse, el hablar mucho, el responder algo totalmente distinto a lo que se está preguntando…
3. Fíjate en diálogos de personas cercanas, trata de imitar comportamientos
No tiene sentido reproducir el habla en los diálogos escritos, pero la observación puede darnos pistas sobre cómo lograr el efecto que buscamos en el punto anterior.
4. Recuerda que toda la fuerza va entre guiones: transmite en lo que el personaje DICE
Conviene evitar los incisos extensos y las explicaciones. Si a la hora de la verdad la voz del personaje no consigue mostrar lo que nosotros explicamos, esto no habrá servido de nada. Trabaja en una voz personal.
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