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Los orígenes del mundo contemporáneo tal cual lo conocemos, es múltiple, sus raíces son profundas y dilatadas a través de la historia humana. Sin embargo, pocos eventos influyeron de una manera más determínate, categórica y trascendental como la Revolución Industrial del siglo XVIII, con la puesta en marcha de la producción mecanizada, en masa y el surgimiento de la clase social más pujante y transformadora de la modernidad: la burguesía. Este panorama fue auspiciado también, inevitable e innegablemente por la Revolución Francesa (marca el final de la hegemonía monárquica) y la Ilustración, que acompañada por los preceptos filosóficos de Descartes (pienso, luego existo) colocan al hombre en la centralidad de la existencia, rector absoluto de su destino, libre para pensar, crear y expresar su realidad material y espiritual.
Las consecuencias de socio tecnológicas de la Revolución industrial y la Segunda revolución y como repercuten en mi contexto actual.
La revolución industrial da un giro en el desarrollo del mundo. Los cambios que ocurrieron gracias a este periodo no fueron solo tecnológicos, sino que abarco también muchas ramas industrializadas las cuales lograron el mundo avanzara mucho productividad. Con esto la clase social tuvieron una gran diferencia y se vio muy marcada su separación entre ellas la diferencia entre clase alta (los burgueses y en clase mediana (trabajadores calificados, entre doctores, abogados y técnicos industriales, y clase baja: el proletariado y campesinos, era muy marcada pues fue uno de los grandes problemas del mundo desde esas épocas. Considerando también la mala distribución de las riquezas se nota entre esas clases sociales, así como la migración del campo a la ciudad en busca de otras oportunidades laborales.
Ya que los avances tecnológicos complicaron el uso de mano de obra humana, con los avances tecnológicos podían sacar la producción con menos esfuerzo humano y con mejores resultados, viéndose beneficiados solo los burgueses, y donde los obreros tenían que vivir en casas muy pequeñas en espacios reducidos y no tenían las mismas condiciones y comodidad, higiénicas, como los burgueses, ellos tenían que trabajar más horas de jornada laboral, y sin ninguna protección legal ante las fábricas y centros de producción.
La Segunda Revolución Industrial, esta es una nueva etapa de crecimiento económico, caracterizada por un extraordinario progreso científico y técnico que facilitó un rápido desarrollo de todos los medios de producción y de nuevas formas de organizar la producción y el trabajo. Entre los años 1870 y 1880 se comenzó a producir una serie de cambios en la producción industrial que fue llamada Segunda Revolución Industrial. Con sus avances se reflejaron en especialización y restructuración de los procesos tecnologías que servían para el mejoramiento del desarrollo de la vida cotidiana. Con esta segunda etapa de la revolución se caracterizó por la mejora de la producción gracias a la incorporación de nuevas fuentes de energía como La electricidad y el petróleo, y la obtención de nuevos materiales se sustituyó el hierro por el acero, y la aplicación de nuevas formas de trabajo como la automatización y el trabajo en cadena. Además, surgió un nuevo tipo Capitalismo: el capitalismo financiero, fruto de las grandes inversiones realizadas con los beneficios que había aportado el primer estallido industrial y el dinero procedente de la banca. La electricidad, que ya había sido descubierta en el siglo XVIII, sustituyo gradualmente el vapor de agua como fuente de energía,
El petróleo, conocido desde la antigüedad después de estudiarlo se logró una fuente de energía hasta que se obtuvo el combustible de dos nuevos sistemas de transporte: el automóvil y el avión. La invención del motor de explosión y la aplicación del petróleo como combustible fueron la base del nacimiento de la industria automovilística, que alcanzo un gran desarrollo en los Estados Unidos y rápidamente se convirtió en uno de los sectores más poderosos que ofrecían un elevado número de puestos de trabajo y estimulaban el desarrollo de industrias secundaria que cogerían una gran importancia por ejemplo, el caucho, los metales no ferrosos, los aparatos electrónicos, etc.
En efecto el mejoramiento de los sistemas que permiten el desarrollo de la industria, observamos en la química, farmacéutica, automotriz, electricidad, la invención de nuevos medios de transporte, la introducción de máquinas automáticas, el empleo de materiales ligeros, como el aluminio y el magnesio, el perfeccionamiento de la producción de acero y en otros, lo cual permitió el desarrollo social que observamos ahora, donde la calidad de vida se ve recompensada y la sociedad moderna se concibe dentro de una forma de vida más fácil en comparación a la que se llevaba tiempo atrás, además de incrementar el promedio de la esperanza de vida que se tenía.
Las consecuencias sociales, políticas económicas y culturales de la primera y segunda guerra mundial en nuestra época contemporánea.
Las guerras mundiales fueron un acontecimiento muy importante para la humanidad a pesar de que se vio fatalmente afectado. Ya que hubo millones y millones de muertes y heridos. Entre soldados y civiles que perdieron la vida.
La primera guerra mundial, gran conflicto bélico producido en entre 1914 y 1918, fue conocido por sus contemporáneos con el nombre de Gran Guerra, una de las causas que produjeron esta guerra fue: la política exterior alemana, en la que Bismarck pretende prevenir la creación de coalición anti alemanas y aislar a Francia, todo esto lo consigue a través de dos sistemas de Alianzas. La Triple Alianza formada por Alemania, Italia y Austria-Hungría y el Tratado de Reaseguro, formando por Alemania y Rusia.