Respuestas
Respuesta:
Jehová dijo que también castigaría al mentiroso que habló con Eva. La verdad es que no fue la serpiente la que habló con ella. jehová .
Respuesta:
La desobediencia de adán y Eva trajo consigo consecuencias, entre ellas la muerte, pero también perdieron cosas valiosas, como vivir en el jardín del edén, la santidad eterna
Explicación:
Debido a que Adán y Eva comieron del árbol del conocimiento del bien y del mal, toda la humanidad fue corrompida con su elemento maligno. Este elemento maligno envenenó cada parte de nuestro ser.
Primero, nuestro espíritu humano —nuestra parte más profunda, creada por Dios para contactarlo, recibirlo y contenerlo— fue completamente amortecido. Efesios 2:1 nos dice que como seres humanos caídos estábamos muertos en nuestros delitos y pecados. Antes de nuestra salvación, aunque estábamos vivos físicamente, estábamos muertos en nuestro espíritu. Dios nos creó para que tuviéramos una relación amorosa e íntima con Él, pero al nuestro espíritu estar amortecido debido a la caída del hombre, quedamos incapaces de tan siquiera contactarlo.
Además, nuestra alma —compuesta de nuestra mente, parte emotiva y voluntad— fue totalmente envenenada por la naturaleza maligna de Satanás. Particularmente nuestra mente, la parte principal de nuestra alma, fue entenebrecida en su entendimiento, y no podía comprender las cosas de Dios. Colosenses 1:21 nos dice que el daño a nuestra alma fue tan extenso que ¡llegamos a ser enemigos de Dios en nuestra mente! Nuestra alma fue invadida completamente por Satanás, el enemigo de Dios.
Por último, nuestro cuerpo, el cual Dios creó puro e incontaminado, fue corrompido por la debilidad y la muerte y llegó a ser carne de pecado. Nuestra carne de pecado con sus concupiscencias llegó a ser una influencia maligna sobre todo nuestro ser.
Éstas son las consecuencias de lo que realmente sucedió en el huerto del Edén. Cada parte de nuestro ser fue dañada, Dios ya no podía usarnos e incluso llegamos a ser Sus enemigos.