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Poderoso Caballero es Don Dinero es una Poesía satírica cuyo autor fue Francisco de Quevedo y data del año 1603. Su estructura corresponde con un poema de diez estrofas con esquema abbaaccc, sus versos son octosílabos, a excepción del último de cada estrofa que es pentasílabo. Cada una de las diez estrofas culmina con el estribillo que da nombre al poema (poderoso caballero es don dinero).
Se dice que es una sátira porque su autor hace una crítica impetuosa del poder del dinero y las riquezas en general en la sociedad, que tienen la propiedad de manejar y comprar las voluntades, títulos, derechos y otras bondades de la sociedad. Ese mismo dinero puede otorgar autoridad y poder a quien lo posea, generalmente sin ser merecedor de ello. Quevedo critica el comportamiento de adulación de la sociedad hacia que quien posea riquezas, tratándolo como un caballero y otorgándole poder, menospreciando los valores, los comportamientos éticos y honorables.
Todas las estrofas tienen seis versos octosílabos ( a excepción de la última que tiene cinco) de estructura abbaac más el estribillo, de estructura cc. En una primera parte de cada verso el autor hace un planteamiento o problematiza una situación y tras un enlace ofrece una solución o justificación irónica a lo planteado.
Ejemplo de ello es el siguiente verso:
Madre, yo al oro me humillo:
él es mi amante y mi amado
pues de puro enamorado
hace todo cuanto quiero
poderoso caballero
es don dinero
En los dos primeros versos se presenta la situación, justificando humillarse ante el dinero por gustarse mutuamente y lo justifica con la ironía de satisfacer todos sus deseos, tal como lo haría un hombre completamente enamorado. Ambas partes pueden identificarse fácilmente, porque el autor las conecta con palabras como: pues, y pues, pero pues.
En los primeros versos una chica joven le habla de don dinero a su madre, lo que parece una apología del hombre y la sociedad. La madre sería la sociedad, don dinero es el dinero y la moza son las personas que actúan como niñas deslumbradas e inexpertas ante él.