Respuestas
1. Cambiarían las clases de Biología
Las ranas son los animales que más se diseccionan en las clases prácticas de Biología en la escuela secundaria. La disposición de los órganos de la rana se asemeja a la de los seres humanos. Su anatomía también es muy útil para enseñar sobre la Evolución.
2. Las pruebas de nuevas medicinas se complicarían
El 11 % de los trabajos científicos que han conducido a sus autores a ganar el Premio Nobel de Medicina han utilizado ranas en la experimentación. Las ranas son un sujeto de investigación muy popular por la facilidad para criarlas y para manipularlas en el laboratorio. Antes de ser probadas en humanos, muchas cosas son probadas antes en ranas.
3. Se cerrarían prometedoras ventanas de investigación
Las ranas no solo ayudan en los ensayos de laboratorio. Ellas mismas están siendo utilizadas para crear curas y cursos de investigación que se derivan de su propia bilogía. Las ranas y los anfibios son muy resistentes y adaptables. Algunos anfibios pueden regenerar sus extremidades, una capacidad que la ciencia sueña con replicar en los seres humanos. Sin ranas, esta ventana de investigación se cerraría.
4. El agua dulce se haría tóxica
Cuando el nivel de algas en el agua dulce sube demasiado, hay poco oxígeno, el ecosistema se hace tóxico y los peces enferman y mueren. Los renacuajos de los anfibios se alimentan principalmente de algas. Si desaparecen las ranas, los cuerpos de agua se llenarían de algas, afectando toda la cadena biológica.
5. Los insectos nos volverían locos
Las ranas mantienen las poblaciones de insectos en niveles tolerables. Comen moscas, mosquitos, polillas grillos y muchas especies más. La super abundancia de insectos que se produciría por falta de ranas sería desastrosa para los cultivos alimenticios y obligaría a utilizar más pesticidas. En los años 1980, el gobierno de India tuvo que prohibir la exportación de ranas ante las calamidades naturales ocasionadas por su escasez.
6. Aumentarían los riesgos de pandemias
Desparecidas las depredadoras naturales de los mosquitos, se multiplicaría la malaria, el dengue, el zika, la encefalitis y otras enfermedades. Aunque estas enfermedades no son mortales si se tratan a tiempo y eficazmente, la presión sobre los sistemas de salud sería tan grande, que en la práctica podrían convertirse en graves pandemias.
7. Tendríamos menos alimentos
El registro más antiguo de consumo humano de ranas data del siglo II en China. Los monjes franceses comían ranas cuando no tenían pescado en los días de guardar. Actualmente, se comen en el mundo mil millones de toneladas de ancas de rana al año. Muchos gourmets no se imaginan la vida sin sus platillos de ranas.