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Respuesta:
En muchos aspectos de la cotidianidad, el petróleo (específicamente sus derivados), son muy requeridos en casi la gran mayoría de las actividades, esto trae consigo una serie de problemas de los cuales se pueden destacar dos: la primera y quizá la más preocupante es que la combustión, uso, extracción e incluso síntesis de sus derivados conlleva la liberación de diversos contaminantes que alteran la estructura y composición del contexto general de forma considerable.
La segunda es que las reservas de petróleo formadas hacen miles de años a partir de diversos microrganismos están a punto de ser agotadas, por ello, todas las actividades (algunas de ellas indispensables) que hoy en día dependen de este tan cotizado y valorado material perderían en gran medida su eficiencia o serian nulas. Por ello la búsqueda para sustituir el petróleo por otros materiales, es una de las mayores prioridades en la actualidad.
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